El domingo comenzamos a vivir las campañas políticas de carácter local en Nuevo León.
Como cada tres años abundan las ideas, cortas y largas, todas convertidas en promesas implícitas y explícitas de que todo estará mejor.
A lo largo de dos meses nos hablarán de seguridad, salud, movilidad y del agua.
Este último tema es sin duda el gran reto, porque la temperatura va a subir y los candidatos sudarán la gota gorda cuando les cuestionen los votantes sobre cómo resolver el problema del agua, les toque o no les toque hablar de eso.
La verdad es que aunque poco meditamos en ello, en el Área Metropolitana de Monterrey necesitamos demasiada agua para consumo doméstico, algo así como 600 albercas olímpicas al día.
El reto de cubrir nuestras necesidades en general se logra con lo que llaman fuentes superficiales, o sea las presas, que dotan de 67 por ciento del líquido a todos.
Por eso debe ser tema para todos en este periodo de conseguir el voto.
Seguro no inventarán el hilo negro los candidatos, las autoridades, los académicos y otros expertos han sobrediagnosticado el problema.
Incluso organismos dirigidos por la iniciativa privada han estado trabajando en ideas, como el Instituto para la Protección Ambiental de Nuevo León, que ha elaborado un Plan Integral de Gestión Hídrica debido a la situación crítica en la región.
Este estudio habla de mejorar el cumplimiento de normativas sobre descargas industriales, y así promover el reúso del agua residual tratada sobre todo en la industria.
Parte de la solución será buscar la tecnificación del sector agropecuario para reducir su consumo de agua y hacerlos más eficientes.
De paso, aunque suene invadir poderes del Ejecutivo, podría pensarse en crear un solo organismo que concentre esfuerzos y recursos, en el que por supuesto haya representación de los ciudadanos.
A ver si los candidatos pueden lograr ideas de fondo, dejar de lado los ataques y divisiones al menos en este tema, al igual que en el de la contaminación del aire que respiramos.
Si esta conjunción de ideas se logra, no solo estaremos más cerca de una solución entre todos, de paso los que buscan representarnos en alguno de los poderes en disputa, habrán mostrado verdadera altura de miras. Veremos.
