La antesala de la campaña para la elección del 2024 se pone llamativa desde trincheras lejanas al escenario nacional, como es Tamaulipas.
La frase “no hay nada para nadie” crea incertidumbre sobre supuestos, chismes y versiones diversas sobre los postulados a cargos como presidencias municipales y escaños en el Congreso estatal, ambas, de mucha relevancia.
Los últimos días, las historias son diversas: en Morena ya hay abanderados al Senado. Olga Sosa y José Ramón Gómez deberán competir contra Eugenio Hernández Flores y Maki Ortiz del Verde, además de Imelda Sanmiguel junto a Arturo Núñez del lado del Frente Amplio por México, más Andrea García y David Cordero en Movimiento Ciudadano.
El problema se encuentra en casos como las diputaciones federales: en el 05 quedó pendiente, aunque la versión es la integración de Beba de la Garza, mientras Adrián Oseguera pone de pretexto su mala relación con Erasmo González para amagar con renunciar a la invitación por el 08, donde tiene mucho por perder ante Chucho Nader tras cinco años sin avances en Ciudad Madero.
El alcalde de Tampico fue designado por Acción Nacional, partido sin quedar exento de jaloneos internos evidenciados el pasado fin de semana, tras la sesión del Consejo Estatal.
Por el puerto dejan en el limbo quién va de Rosa González y Mon Marón, casi similar en la urbe petrolera cuyos protagonistas son Andrés González y Carlos Fernández. El CEN deberá resolver esto.
Si bien los azules prácticamente confirmaron sus cartas a jugar en la mayoría de los ayuntamientos, está la expectativa de qué posibilidades tienen en las urnas cuando se sepa, posiblemente en marzo, la baraja de los guindas.
Al menos en cuatro ciudades pelearán la reelección: Nuevo Laredo (Carmen Lilia Canturosas), Reynosa (Carlos Peña), Victoria (Lalo Gattás) y Altamira (Armando Martínez).
Sin embargo, los segundos o muy cercanos dentro de las preferencias internas en el seno de la 4T, pujan por posiciones en las planillas o bien, de ganar, espacios en el servicio público. La labor le toca al delegado del CEN Mario Llergo.
La hora de determinar a esas figuras se acerca irremediablemente. La tensión es alta y muy posiblemente, cuando se confirme, será una bomba a explotar y con daños colaterales.
