En la etapa de cambios constantes en el estilo de trabajo, un nombre poco sonado comienza a tomar fuerza, Chief Happiness Officer, o director de la felicidad. Muchas personas y aún varias empresas no entienden su función o su importancia. Un director de la felicidad toma un rol muy importante en la mejora de las condiciones laborales de las personas, siendo la persona a cargo de asegurar el bienestar y el buen desempeño de todos los miembros de un equipo laboral.
¿Sabías que en todo México sólo existimos actualmente trece personas que desempeñamos ese cargo? El director o directora de la felicidad generalmente es la persona con estudios en psicología y un enfoque de especialidad o maestría en administración, o desarrollo organizacional, capaz de analizar el estado actual de una organización, identificar los rasgos que la caracterizan, las personas que en ella se involucran, y cómo las interacciones de estas personas generan un estilo particular de comunicación y de convivencia. Estos y otros factores en conjunto generan la cultura interna de la organización. El CHO, o director de la felicidad, evaluará las condiciones laborales, asegurará la salud y seguridad de todos en la organización, buscará técnicas que mejoren la comunicación, convivencia y eficacia de procesos, buscará oportunidades de crecimiento personal y profesional para todos, administrará los tiempos y actividades de las personas, creará un ambiente saludable en el que todos los miembros de la organización puedan desenvolverse y sentirse apreciados, y velará porque los valores y objetivos internos de la compañía se mantengan y cumplan.
Pasamos cerca de un tercio de nuestras vidas trabajando, así que ¿por qué no hacer que ese trabajo nos haga felices? Contar con un profesional de la felicidad en el equipo laboral, beneficia a todos. Este trabajo además de ser novedoso es muy importante, pues permite una interacción constante con todos los miembros de la organización, fomenta vínculos interpersonales significativos y crea mejoras evidentes en el estado de ánimo de las personas. Son diversas las funciones que se cubren con el rol de Chief Happiness Officer, y siempre va de la mano con un buen acompañamiento de recursos humanos, alta dirección y gestión de calidad interna.
Pilar Álvarez Quintero