Este fin de semana es Memorial Day en Estados Unidos, y aunque esa no sea una fecha que se refleje en nuestro calendario como fin de semana largo, definitivamente es una fecha en donde los estudios suelen poner algunos de sus estrenos con mayor potencial, para arrancar oficialmente el verano cinematográfico y hacer que la gente regrese a la pantalla grande.
Como ya se enteraron, era una misión imposible no hacerlo, Tom Cruise estuvo en México el martes en la gran premier de su más grande franquicia de acción, y la gente estaba emocionada a más no poder (aunque debemos inventarnos algo nuevo, eso de “Tom, hermano, ya eres mexicano”, ya se la sabe).
También sabemos que Lilo y Stitch regresan con la cinta de (semi) live action. Les garantizo un gran rato en ambas cintas si son fans de los personajes, Ethan y Stitch en particular. Les garantizo muchas discusiones sobre qué se verá primero, porque aunque no lo crean, la cinta de Disney está registrando extraordinariamente bien en la preventa con públicos que no solo son los infantiles.
Sé que cada año hay fechas así. El año pasado trataron de hacer de Glicked (Wicked y Gladiador) un Barbenheimer (Barbie y Oppenheimer) en el fin de semana de Accion de Gracias. No se logró, pero tampoco les fue tan mal.
Lo que hay que observar es que más allá de aventar números de taquilla, es el fenómeno cultural y lo que ocurre con ello. Siguen siendo remakes y secuelas lo más cercano a garantizar algún tipo de éxito, y sabemos que en este caso “¿StitchPossible?”, será un par de historias de éxito.
También hay que ver lo invertido en las producciones y en las campañas de promoción. Honestamente da gusto ver eventos enormes en los tiempos de pantallas personales y de no querer salir de casa, para divertirse con las grandes apuestas cinematográficas de entretenimiento puro.