En un vasto océano digital donde ya navegan más de 2 mil millones de sitios web, el desafío de lanzar una nueva página no es menor.
Cada uno de estos sitios representa un intento de captar la atención del inmenso público que se conecta cada día a Internet.
Ante esta realidad abrumadora, diseñar y programar un sitio web que no solo se destaque, sino que también logre cumplir sus objetivos estratégicos, puede parecer una tarea titánica.
Para enfrentar estos retos, te presento a FREDI, un acrónimo que representa un conjunto de características esenciales para el éxito de tu página web.
Con FREDI como guía, descubrirás cómo crear un sitio que no solo capte la atención, sino que también alcance sus metas de manera eficaz y eficiente. Te cuento, ¿quién o qué es FREDI?
Funcionalidad (F): Se refiere a cómo funciona el sitio web en términos de navegación, estructura y accesibilidad. La funcionalidad asegura que los usuarios puedan encontrar lo
que buscan fácilmente y realizar acciones sin complicaciones, como comprar un producto, inscribirse a un servicio o simplemente navegar por la información.
Rentabilidad (R): Este aspecto trata sobre asegurarse de que la inversión en el sitio web genere un retorno adecuado. Esto puede incluir aumentar las ventas, generar más leads o simplemente fortalecer la presencia de marca. La rentabilidad se evalúa en términos de costo-beneficio y efectividad en alcanzar los objetivos comerciales.
Estética (E): El buen diseño no solo es sobre la apariencia, sino cómo esta contribuye a una mejor experiencia del usuario. Un diseño estético y atractivo puede captar la atención de los visitantes y hacer que se queden más tiempo en el sitio, además de transmitir profesionalismo y credibilidad.
Diferenciador (D): Se refiere a lo que hace único al sitio web en comparación con otros en el mismo mercado. Esto podría ser algo relacionado con herramientas únicas, contenido especializado, funcionalidades exclusivas o una experiencia de usuario excepcional. Tener un diferenciador claro puede ayudar a destacar en un mercado saturado.
Innovación (I): Implica incorporar elementos nuevos y creativos en el diseño y funcionalidad del sitio web. La innovación puede ser tecnológica, como la implementación
de la inteligencia artificial, recorridos virtuales, más y nuevos métodos de pago o funcionalidades para personalizar la experiencia del usuario y la interacción usuario-web.
Centrar tu atención en el cliente y construir tu página web alrededor de sus necesidades te permitirá transformarla de un simple folleto digital a una herramienta dinámica que capitaliza cada visita.
Lo esencial es que tu sitio no solo satisfaga, sino que incentive a los usuarios a regresar frecuentemente, convirtiendo tu proyecto en un referente dentro de su segmento.
Y lo más importante, en este camino debes mantener la objetividad: el proyecto no es para satisfacer tus gustos personales como dueño, fundador, director o líder del proyecto.
Si aplicas bien los principios de FREDI, tu página web no solo captará el interés de tus clientes, sino que también te brindará resultados que superarán tus expectativas.