El viernes nueve se inauguró la Feria Internacional del Libro Coahuila, la sede ha sido el campus de la Universidad Autónoma de Coahuila, de Arteaga, Coahuila, donde acusó un número muy importante de casas editoriales nacionales e internacionales presentando una oferta sensacional de libros. a buen precio, cosa importante porque si algo ha aumentado también es el precio de edición de libros y por ende el costo para el lector.
En esta ocasión sucedió un hecho muy importante, porque por primera vez en Coahuila, se presentaron 14 libros, de autores de la Asociación de Cronistas e Historiadores.
La Presentación de nuevos libros en el seno de sus asambleas es frecuente, pero nunca había habido una jornada exclusiva para presentar el trabajo de los investigadores de la Asociación, cosa que además no sucede en las muchas ferias del libro que hay en el país.
Esta innovación, que según expresó la Secretaria de Cultura del Estado de Coahuila, Ana Sofía García Camil, se mantendrá como un elemento constitutivo en las siguientes ferias del libro en nuestro estado, acarrea una obligación, primero para la Asociación porque implica el compromiso de incrementar el trabajo investigativo y la escritura de nuevas obras y luego para las instancias gubernativas a nivel municipal y estatal para incrementar el presupuesto y mejorar los mecanismos para la edición de los libros; porque si bien es cierto entre los libros presentados, algunos fueron patrocinados por municipios y la Secretaría de Cultura de Coahuila, la mayoría se financió por los propios autores, ya de sus personales bolsillos o con la ayuda de amigos, lo cual limita el número de copias y la distribución gratuita para apoyar la lectura de los coahuilenses.
Lo anterior implica la revisión de la política editorial del Coahuila y sus municipios para obligar a que presupuestalmente haya un fondo exclusivo para la edición de libros, que sea irreductible y por el contrario siempre tenga incremento anualmente.
Claro ha habido buenas épocas, cuando los gobernadores y presidentes municipales son lectores y amantes de la cultura, pero también malas épocas cuando las autoridades no entienden la importancia de este rubro de la administración pública.
Urge legislar sobre este punto a nivel estatal y municipal para que Coahuila vuelva a ser la Atenas de México.