Nunca es tarde para reaccionar y menos cuando se trata de enfrentar a un enemigo tan temible como lo viene siendo el covid 19. La decisión de la Liga Mx de sancionar a aquellos futbolistas (y supongo también entrenadores) que se muestren en fiestas o reuniones riesgosas, así sean de naturaleza privada, debió haber sido parte de un paquete inicial contra la pandemia, pero llegó apenas hace unos días.
Esto tras la aparición en redes sociales de un video en que el goleador del Cruz Azul, Jonathan Rodríguez, es balconeado en una fiesta en la que varias mujeres y otro hombre se encuentran bebiendo. El delantero uruguayo aparece ahí portando el uniforme con el que los jugadores de este equipo se mantienen durante las concentraciones previas a los partidos.
Al menos para este sector de privilegiados del deporte profesional contraer covid, a estas alturas, es casi un acto de irresponsabilidad. Tienen toda la información y tienen todos los cuidados para no contagiarse.
Lo que sigue ahora es que cada club incremente sus controles pues no siempre aparecerá un video tomado por un externo para documentar la irresponsabilidad e indisciplina de un futbolista.
Se debe acabar con la cultura del encubrimiento. De nada va a servir este endurecimiento de la Liga si dentro de los clubes se siguen tolerando actitudes inmaduras que bien puede ser hasta criminales pues lo que está en juego literalmente es la vida de personas y no sólo el que se pueda ocasionar el aplazamiento de partidos de futbol.
La Liga por ahora suspenderá a los futbolistas indisciplinados y los obligará a estar aislados y a hacerse pruebas... se dice que los clubes aplicarán multas de hasta 100 mil pesos. Son tan poco profesionales algunos de estos personajes, se sienten tan intocables por nadie, que no dude que estén dispuestos a pagar esto con una sonrisa y seguir con sus francachelas.
