Celebro la firmeza de carácter de Gerardo Martino, el entrenador de la Selección Mexicana de futbol. Es este rasgo, sin duda, otra de sus cualidades. No nada más sabe de estrategia y táctica, sabe conducir con justicia y claridad a un grupo de futbolistas encumbrados en la fama.
Habrá que escuchar sus razones para no incluir a Javier Chicharito Hernández en la amplia lista de 40 jugadores pre seleccionados para el siguiente compromiso oficial del Tricolor, la Nations League... Pero lo que uno puede suponer que consideró el apodado Tata, insisto, habla de firmeza y congruencia.
Es cierto que el Chicharito arrancó de forma extraordinaria su participación en el recién iniciado campeonato de la MLS de los Estados Unidos... El delantero ha concretado seis goles en sus primeros cuatro partidos. Pero viene de una sequía goleadora muy extensa, complicada aún más por algunas lesiones y, aunque nunca ha quedado del todo expuesto por un expediente disciplinario como seleccionado, en este mismo proceso de Martino, su disciplina ha sido un tanto cuestionable.
Y es que, que se sepa, nadie le ha cerrado las puertas a Javier. Ni tampoco, como sí lo hizo Carlos Vela, es que Chicharito haya renunciado a la misma. Pero sí queda claro que el ex futbolista del Manchester United y Real Madrid (entre otros equipos europeos), tendrá que prolongar su racha goleadora, y algunas otras cositas, para ser nuevamente llamado.
Mantener una decisión de este tipo por parte de Martino es también muy reconocible si uno atiende lo que este jugador representa en términos mercadológicos. Chicharito vende y más ahora que ha vuelto a jugar y a meter goles.
Pero el seleccionador tiene otros jugadores que pasan por buen momento, que han mantenido regularidad y que no se sienten los dueños del vestidor. Muchas veces, otros seleccionadores, se vieron flexibles e indulgentes con Javier. Ese tiempo, queda claro, quedó atrás. Todos saldrán ganando con esto.
Rafael Ocampo