salvo la interferencia en la vida interna del sindicato independiente de trabajadores de Volkswagen para repetir la votación, la STPS brilla por su ausencia en las negociaciones.
La secretaria de Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde Luján, seguramente tiene una agenda muy ocupada, pero como autoridad laboral poco ha contribuido para evitar un conflicto.
Lo ocurrido en la planta armadora en la segunda consulta, donde se rechazó el convenio salarial y contractual, debe tener de regreso a los representantes de ambas partes en la mesa de negociaciones.
En estricto rigor, debieron haberlo hecho con el resultado de la votación de la primera consulta, pero hicieron de todo, hasta la maniobra legal del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral para favorecer a la empresa y llamar a una segunda consulta.
El gobernador del estado, como ha sucedido con sus antecesores ante un eventual conflicto laboral, manifestó que intervendrá en las negociaciones, pero al tratarse de un asunto de competencia de la autoridad laboral federal, quedará solo en un exhorto a la “reflexión” de los trabajadores.
Ahora el balón está en la cancha de la representación patronal y se sabrá en breve si está en condiciones de hacer un esfuerzo extraordinario para mejorar el ofrecimiento salarial o aumentos vía prestaciones para evitar la huelga.
El sindicato que dirige José Juan Hernández, después del acto de congruencia en la votación de sus compañeros de trabajo, tiene ahora un mandato y debe encontrar una mejor negociación que atienda la expectativa de los afiliados al Sitiavw.
Ya no es momento de lamentaciones como lo han expresado en un comunicado los directivos de la firma alemana, quienes se sienten decepcionados y consideran que la decisión sindical daña la relación que han construido con los trabajadores en 50 años.
Deslizan también una afirmación, que igual carece de sustento, porque no ofrecen datos precios de la supuesta intervención de “intereses ajenos” al ámbito laboral con los trabajadores.
“Observamos con profunda preocupación que intereses ajenos a la vida laboral de la empresa hayan influido en el proceso de votación, impactando el resultado a partir de argumentos falsos y sin ningún fundamento”, reclama la empresa, pero no hace señalamientos precisos.
Pablo Ruiz Meza
