“A mí no me importa si marca o no marca, a mí me importa que juegue bien por el equipo, lo está haciendo”, fueron las palabras de Carlo Ancelotti en una entrevista para ESPN, en las que describía lo que pensaba del paso de Hirving Lozano con el Nápoles, no muy positivo hasta ese 5 de noviembre del año pasado. El entrenador depositó su confianza en el mexicano y no lo soltó en ningún momento mientras estuvo a cargo, pues él fue quien impulsó la compra más cara en la historia del club, con la certeza en todo momento de que redituaría sobre el terreno de juego.
Como él, miles de fanáticos del cuadro italiano pensaron en que sería el eslabón que conectaría al equipo con el éxito. No ha sido así, pero eso, la irregularidad, no le quita la calidad a uno de los mejores jugadores mexicanos de la actualidad. Lo que sí es que el adiós de Ancelotti fue un golpe que no esperaba, porque era una carga más a la difícil tarea que tenía por acoplarse. Y entonces, se vio inmerso en un escenario desconocido, en el que había otros futbolistas delante de él para ser titulares, ya sea que jugara de delantero, por derecha o por izquierda, y en el que su nuevo entrenador (Gennaro Gatusso) no lo respaldaba al cien por ciento...
Y hoy, Hirving está ante uno de los retos más importantes de su trayectoria. El brillar en un equipo importante en la Serie A, con muchos aspectos en contra. El Chucky nunca ha sido de esos jugadores que busquen los reflectores. Al contrario, suele hablar poco con los medios de comunicación, y cuando lo hace, imprime mucha seriedad en sus palabras, y con ese tono también ha afrontado otros discursos y pasajes de su vida y trayectoria. Según contó a La Afición hace tiempo Jesús Martínez Patiño, presidente del Pachuca, Hirving maduró rápido por la necesidad de salir adelante y conquistar sus sueños al ser padre muy joven. Eso lo ayudó a no distraerse con otras cosas, a enfocarse en el trabajo y en mejorar. Así como eso, hoy Lozano debe tomar este momento como una lección que lo hará crecer. Hoy Lozano debe sacar todo el talento y coraje para vencer la barrera que tiene delante, porque tiene todo para hacerlo, porque su habilidad de quitarse de encima a los rivales, de desquiciarlos, así como su rapidez serán sus armas principales para vencer las críticas.