Hay quien dice que si se inicia bien el día, así seguirá hasta terminar, y la práctica de yoga por la mañana es una de las mejores formas para empezar la jornada diaria. De entrada, no es necesario hacer una sesión completa de una hora, con 10 o 15 minutos es suficiente y los beneficios son muchos.
Como explica el portal naturalmentekneipp, al practicar yoga previo a nuestras actividades cotidianas se activa la musculatura, aumentando la energía lo que nos mantiene alertas y atentos; se incrementa la fuerza, la resistencia muscular y la flexibilidad, se revitaliza y estimula la mente, y todo esto mejora el estado de ánimo, reduciendo el estrés y la ansiedad.
ILUSTRACIÓN: Juan Carlos Fleicer
Así que hoy te traemos cuatro posturas para practicar por la mañana:
Para empezar Jathara Parivartanasana, la postura de Torsión Abdominal acostada ayuda a relajar la columna, espalda, hombros y cuello. Beneficia también el aparato digestivo y la circulación. Es una posición donde se tonifica el abdomen y flexibilizan las caderas y la columna vertebral. Mantén la espalda baja fuerte mientras la practicas.
Una de nuestras consentidas es Viparita Karani, y desde luego no podía faltar en nuestras recomendaciones para iniciar el día. Viparita Karani activa el sistema nervioso parasimático con el que el cuerpo entra en modo de regeneración y recuperación que en épocas palabras es el proceso de autosanación interna con lo que se retarda el proceso de envejecimiento.
La tercera posición para hacer por la mañana es Ananda Balasana, la postura del Niño Feliz. La pose le da al estómago “un buen masaje” y mejora la digestión al estimular el sistema digestivo. También es muy buena para reducir la rigidez en la región lumbar y las caderas descomprimiendo el sacro, aliviando así el dolor de espalda. Además, proporciona alivio a los problemas de la vida diaria promoviendo una energía positiva y creativa de gozo infantil.
Finalmente tenemos a Adho Mukha Svanasana, la postura del Perro mirando abajo para cerrar. De acuerdo con algunos yoguis, si solo se pudiera ejecutar una postura al día, sería la mejor opción, debido a que prácticamente todo el cuerpo se activa, no solo estirándose, sino también fortaleciéndose y tonificándose. Además, al colocar la cabeza por debajo del nivel del corazón, también se obtienen los beneficios de las posturas invertidas.
Marién Estrada
@marien_caminoa7
