Uno de los grandes males de la sociedad contemporánea es el tiempo que permanecemos sentados, ya sea frente a una computadora o frente a un televisor, en especifico “estar sentado más de seis horas al día eleva la probabilidad de morir en los próximos 15 años en más de un 40% en comparación con los que sólo se sientan una media de 3 horas al día”. Paradójicamente, el Hatha Yoga Pradipika, uno de los textos fundamentales del yoga, considera a las posturas sentadas como las más importantes.
Lo cierto es que estar sentado sobre una silla con una mala postura dista mucho del trabajo que requieren las posturas también llamadas “sedentes”. De entrada las posiciones sentadas requieren de una gran flexibilidad en las rodillas, la zona lumbar y las caderas.

En general, estas asanas se consideran de calma, ya que relajan los nervios, eliminan la fatiga y refrescan el cerebro. También ayudan a regular la presión arterial, a recuperarnos de la enfermedad, así como a promover un sueño reparador. Además desarrollan la conexión con la tierra a partir del contacto con el suelo de caderas, articulaciones pélvicas y la parte inferior de la columna, trayéndonos al momento presente.
Como explica la maestra Jhana Dhakini, la importancia de estas posturas es que se relacionan con los aspectos de introspección, meditación y descanso, así como con la depuración de órganos como el hígado, colon, páncreas y bazo. También contribuyen a la flexibilidad de la columna vertebral y de la cadera, y son muy efectivas para trabajar la elevación y la energía anti gravitacional. abrir profundamente la cadera, permitiendo la liberación de emociones y la relajación de la mente.

Así que hoy te proponemos tres muy benéficas posiciones sentadas. La primera es Virasana, la postura del Héroe que estira la parte delantera de los muslos, enfocándose en los flexores de la cadera, que pueden rigidizarse por estar sentados durante mucho tiempo. La postura promueve la postura correcta y facilita una sensación de conexión a la tierra y a la introspección. Las personas con lesiones en las rodillas, tobillos o caderas deberán realizar una variante menos demandante.
Janu Sirsasana, la postura del Sauce y Upavistha Konasana, la postura del ángulo abierto son posiciones que igual promueven flexibilidad en la cadera, espalda y músculos posteriores en las piernas, pero también un profundo descanso mental.
