Un día sin mujeres? ¿Un golpe a la realidad? ¿El “futuro femenino”? ¿Un cambio a la humanidad? ¿El momento de “reflexión violenta”? ¿Un mundo de visiones y opiniones nuevas? Desde que me enteré del paro nacional que se realizará el lunes 9 de marzo denominado “Un día sin nosotras” comencé a imaginarlo todo.
¿Qué ocurrirá? ¿Será cómo todos piensan acerca de un colapso laboral? Nunca pensé en el simple hecho de faltar, no. Mi posición respecto al tema va mucho más allá… Quiero ser parte de este hecho que seguramente se convertirá en algo histórico que marcará nuestro país y que nos pondrá a reflexionar aún más.
“Yo no muero, a mí me matan”, “De camino a casa quiero ser libre, no valiente”, “Nos queremos vivas, libres y sin miedo”, “Si te quiere no te pega, insulta, controla, encierra, ignora”, “Mi cuerpo no quiere tu opinión”, “La violencia deja marcas, no verlas deja feminicidios”, “Abandona tu Diego Rivera”, “¿Que las chicas no podemos hacer qué..?”, “No quiero flores, quiero respeto y no solo un día sino todos los días”, “Para decir ni una menos, hay que dejar de criar princesas indefensas y machitos violentos”... Estas son algunas de las frases que desde hace algunos días se encuentran en las redes y que tocan las fibras de cualquiera.
Pero, ¿qué pasará mañana? En Tamaulipas se han dicho muchísimas teorías respecto al tema; en lo personal no iré a laborar en ninguno de mis dos trabajos debido al apoyo que nos dan las empresas.
Admiro la libertad que nos dan en Notivox Tamaulipas, en cómo nuestros escritorios simularán qué pasaría si un día no llegáramos, si algo nos ocurriera y justamente de eso se trata este lunes. ¿Qué haremos las mujeres? Unirnos en esta protesta silenciosa en donde simplemente no tenemos que aparecer para ser escuchadas, para que en toda la República Mexicana se vaya cambiando la mentalidad de un pueblo que ha permanecido en silencio durante toda su existencia.
Ojalá que todas las mujeres lo entiendan de la misma forma, pues para esto se necesita abstenerse de la presencia, ojalá que en verdad no salga ninguna de nosotras, que no se vea a nadie disfrutando de un café en un restaurante o cenando muy contentas. Ojalá que haya unidad entre nosotras y que se acaben estos días.