En algunas entidades del país, los contagios por covid-19 han aumentado considerablemente y el mismo gobierno federal, ha reconocido que la quinta ola ha empezado a llegar al territorio nacional.
En Coahuila, los casos poco a poco han ido aumentando, en forma muy sigilosa siguen apareciendo personas infectadas y el número va creciendo, por lo que muy pronto un repunte de este mortal virus se puede presentar.
En estos momentos muchos laguneros siguen haciendo su vida normal, en la calle, en oficinas, cafeterías y restaurantes, quienes acuden a los mismos lo hacen sin guardar los protocolos que en un tiempo se establecieron, ya que van sin cubre bocas, tampoco usan el gel antibacterial y mucho menos guardan la sana distancia.
Ya se dijo que en el estado de Sinaloa los contagios han aumentado, por lo que las autoridades ya anunciaron la llegada de la tercera ola y eso debe de preocupar a los laguneros.
Viene la temporada de vacaciones, muchos habitantes de la región ya han empezado a reservar en ese destino turístico, el cual es elegido por los laguneros debido a su cercanía.
La historia se vuelve a repetir, ya que muchos de los que el año pasado acudieron al puerto de Mazatlán a divertirse a lo grande, pese a saber que los contagios habían aumentado en ese sitio exponencialmente, finalmente terminaron infectados y al llegar a la región lagunera, esparcieron el virus por todos lados e infectaron a personas cercanas.
En Durango también las autoridades de Salud del Estado ya empezaron a ver con desconfianza el aumento de personas contagiadas, por lo que en cualquier momento habrán de emitir algún anuncio para que los ciudadanos no dejen de utilizar el cubre bocas y además, guardar la sana distancia, ya que el rebrote podría pasar factura y muchos duranguenses se podrían volver a contagiar.
También hay que reconocer que tanto en Coahuila como en Durango, hay ciudadanos que siguen portando ese tapa bocas, siguen usando su gel y además, respetan la sana distancia, lo cual realmente ayuda a que si alguien sale contagiado, el virus no pueda esparcirse y así se detienen en lo que se pueda, el número de infectados.
Mientras las autoridades no emitan indicaciones para lidiar contra el covid-19 y sus variantes ante la inminente llegada de la quinta ola de contagios, no queda más remedio que no bajar la guardia y respetar los protocolos que ya se han establecido.
