No pasó la Reforma Electoral propuesta por Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, luego de que los diputados federales del PRI, PAN, PRD y MC votaran en contra y evitaran que el partido en el poder obtuviera la mayoría.
Este fue otro duro golpe al Mandatario de la Nación, a quien no le quedó más remedio decir que algo es algo, luego de que su Plan B en materia electoral fuera aprobado, con el cual se dijo habrán de lograrse ahorros por más de 3 mil 500 millones de pesos, lo cual es solamente una quinta parte de lo que se hubiera obtenido con la reforma original.
Se dice, que ahora la pelota está en manos del Senado de la República y ya se habla de que el bloque opositor hará lo mismo y lo propuesto por el Ejecutivo se quedará en el tintero.
El panorama político se ha puesto interesante a raíz de querer modificar al INE, ya que esta acción provocó que los ciudadanos levantaran la mano, dijeran que el INE no se toca, pero además, mostraron su molestia con una megamarcha en la que participaron 800 mil mexicanos, quienes lo hicieron de modo propio y sin recibir frutsi, lonche y 250 pesos, más el traslado.
Esta acción provocó de inmediato la reacción del Presidente de México, quien también convocó a una marcha que juntó a un millón 200 mil seguidores en el recorrido del Ángel de la Independencia a la plancha del Zócalo, pero con la diferencia que la mayoría de los que asistieron, fueron de los llamados “acarreados”.
Ahora, cuando AMLO se sentía seguro al decir que el INE si se toca, todo le salió mal, además lo que sucedió en la Cámara de Diputados fue celebrado no solamente por los legisladores, por organismos que están en contra del gobierno actual, sino también por muchos mexicanos.
En qué va a parar esta historia, nadie sabe, ya que Andrés Manuel López Obrador no quita el dedo del renglón y si algo tiene, es que le gusta siempre salirse con la suya.
El bloque opositor demostró que los partidos que lo conforman tienen vida, por lo que la lucha por la Presidencia de la República en el 2024, no será nada fácil para el Mandatario y para Morena.