Después de ver lo que están haciendo los famosos plásticos con el planeta, ya hay muchas personas que han empezado a trabajar en evitar que se sigan entregando en cualquier presentación.
Vemos como bolsas, botellas, popotes y muchos productos más hechos a base de plástico, tienen inundados ríos, mares, lagos y hasta los canales de riego de la región lagunera.
Es increíble el grave daño de contaminación que estos plásticos han provocado, están acabando hasta con animales y hay casos que se quedan grabados en la memoria, como el de una tortuga que tenía incrustado un popote en su fosa nasal o bien, de peces que han muerto por ingerir bolsas de plástico.
Siempre decimos que nos falta cultura, que si tiramos basura por la ventana del auto, que si no cuidamos el agua, que si no usamos el cinturón de seguridad, que si no respetamos el reglamento de Tránsito, que en nuestro México lindo y querido las leyes se hicieron no para respetarse, sino para violarse.
Pero cosa contraria sucede cuando cruzamos hacia los Estados Unidos, en donde nos comportamos bien y ahí sí que no nos hace falta cultura.
Qué triste es ver las calles llenas de basura, principalmente de plásticos, los cuales provocan que en temporada de lluvias los drenajes se colapsen, además, en los canales de riego las compuertas se taponean y vienen los desbordes de agua que inundan viviendas.
Ahora, ya hay voces que se están alzando, que están pidiendo que ya no se entreguen bolsas en los grandes centros comerciales, en las tiendas de conveniencia y en cualquier comercio por más grande o pequeño que sea.
También se busca que todos los artículos desechables dejen de venderse, lo mismo que globos y todo lo que afecte al medio ambiente.
Se sabe que es difícil lograrlo, pero nunca es tarde para intentarlo y ya hay comercios que han empezado con acciones concretas, como la de no dar bolsas de plástico.
También hay cafeterías, restaurantes y diferentes negocios en donde ya se están cambiando los popotes de plástico por metálicos o por degradables, lo cual es una buena noticia.
De verdad, nunca es tarde para no aceptar productos de plástico y mucho menos para dejar de tirarlos a la calle.
