Se vienen más gastos y es que a los pequeños no se les puede dejar sin disfrutar de un regalo el Día del Niño, algo que se ha vuelto una tradición en todo el territorio nacional. Algunos padres de familia saben que tienen que entrarle a la coperacha en la escuela, en donde les habrán de celebrar a todos los estudiantes de primaria, algunos con pastel y refrescos y en algunas instituciones los maestros se avientan a organizarles alguna taquiza. Pero se viene lo que para muchos es el gasto más fuerte del año, el Día de las Madres, ya que tanto hijos como hijas saben la importancia de regalarle algo al ser querido que les dio vida. Pero además, también para muchos papás se viene un gasto doble, ya que además de regalarle a las “jefas de la casas”, también le tienen que comprar su buen regalo a las dueñas de sus quincenas, ya que si no les dan algo bueno, simplemente “arde Troya”.
Es por eso que en estos próximos días en muchos centros comerciales, en negocios que se encuentran en los primeros cuadros de los diferentes municipios de la región lagunera, han empezado a aparecer letreros en los cuales anuncian las ofertas de sus productos que pueden gustarles a las madres de familia. Se pueden ver que los perfumes, ropa, zapatos, no se diga equipos electrónicos y hasta lavadoras o refrigeradores, sin olvidad las pantallas de 50 pulgadas o más que tienen atractivos descuentos.
Por el otro lado, muchos restaurantes ya están preparados para recibir a las mamás el 10 de mayo, por lo cual ya empezaron con las reservaciones. En algunos sitios no solamente ese ser que nos trajo al mundo disfruta de unos deliciosos alimentos, también se deleitan con algún cantante que ameniza en el restaurante. Ya todo se encuentra listo, los comerciantes ya esperan solamente que se llegue la hora, para poder atender a las familias, tanto a las madres de familia como a las esposas, sin faltar los vendedores de flores y arreglos florales, los cuales saben que para ellos es la mejor época del año para poder ofertar desde rosas hasta orquídeas. Ahora solamente falta utilizar el poder de sus firmas y pagar con tarjetas los regalos de las “jefecitas” y de la mujer de la casa.