Los Tigres llegaron a la final.
Yo sentí una gran emoción al ver el partido donde el Bayern Múnich le gana, con un solo gol, a los Tigres, que conservaron su estilo de juego y su defensa fue ejemplar. Pero al no existir oportunidades de gol, tuvieron que perder en forma realista, un poco polémica, el partido al que nunca había llegado ningún equipo mexicano.
Yo a mi edad tengo en mi memoria la subida a Primera División de los Tigres, en aquella época donde el futbol de pasión y romanticismo inspiró a un gran equipo a ser campeón en tres ocasiones (dos de Liga y una de Copa) y a poner en alto el nombre de la UANL.
Ahora nos toca perder, pero demostrando la calidad de llegar hasta allá, jugando contra un gran equipo, que tiene seis títulos recientes y que batalló para lograr su victoria, aunque como dijo el Tuca, jugaron mejor; lo que debe darnos un gran orgullo a todos los mexicanos, porque se demostró que nuestro futbol tiene tamaños para ser respetado en cualquier lugar del mundo
Descartes: Pienso, luego existo… Melancolía y orgullo inundaron mi nostalgia. ¡Felicidades por haber llegado hasta la final del Mundial de Clubes!
