La organización del beisbol viene en ascenso; la del futbol no encuentra su lugar.
Unión Laguna ha venido ganando adeptos y entusiastas seguidores. Santos ha provocado aislamiento entre el club y la gente.
Son dos verdades que con declaraciones desafortunadas de los verdes se ha incrementado la distancia.
No es posible admitir que al hablar la gente del futbol contradiga la razón. Ejemplo: se dijo que las expectativas eran para el próximo torneo.
¿Cómo entender esto?
Si el idioma español o castellano lo entendemos de la misma manera, nos tenemos que esperar hasta febrero del 2025 para poder celebrar algo atractivo al lado del Santos.
Unión Laguna, batallando y todo como es normal en el mundo del beisbol se apresta a intentar algo asombroso.
Su afición está contenta porque las exigencias se van cumpliendo y satisfacen sus anhelos.
El futbol separa cada vez más la maravillosa atracción que siempre había existido.
Hoy, existen seguidores que quieren al Santos pero hay muchos, muchísimos, y cada vez se incrementa, que antes lo querían y ya no sienten nada por él.
Es la cruel vivencia. El presente es desolación, en cambio para los guindas es de buena vibra.
Han cambiado mucho las realidades.
Una empresa genera contentamiento pero la otra provoca incomodidad. Increíble haber pensado tiempo atrás que esto fuera a ser posible.
Las alegrías de uno se las ha pasado al otro porque hay amplia insatisfacción en los del futbol.
Que gocen los del beisbol mientras los otros intentan reconstruir su presente dando resultados positivos y también haciendo mejores declaraciones.
