No, bueno, lo de Sandra Cuevas debe ser culpa de las chinches. No puede ser que una de las grandes del humanismo se pelee a cada rato, y ahora en una demarcación priista, donde me la echaron a patadas vestida de Robocop. Desde que me la pelusearon en el Frente Marchito, prácticamente ya no la quiere ni Monreal, y apenas Carlos Alazraki y eso porque lo tiene en la nómina, según las malas lenguas.
Qué mala onda que nadie sepa valorar a Sandra Cuevas, siendo tan gentil, tan humilde, tan amable y tan carismática. Seguramente le tienen envidia. ¿Dónde están los panistas que tanto la apapachaban cuando quería madrear a Claudia Sheinbaum? Y pienso en el subgerente del Cártel inmobiliario, Santiago Taboada, que ahora no la pela. ¿Dónde está Liosa Limón, que era su amiguis favorita? ¿Dónde están todos aquellos gurús mediáticos voxistas que la veían como Indira Gandhi? ¿Qué chinches les picaron?
No se vale, esto debe ser culpa de las chinches que dice el doctor Enrique Graue que no hay en la UNAM, aunque desde su inexistencia ya causaron el cierre de varias escuelas y facultades. Increíble que el rector no sea capaz de enfrentar un problema tan simple, ocultándolo como ha ocultado de la misma manera otras problemáticas de la UNAM, como el acoso sexual, pues lo único que le importa es mantener su vida de pachá. Y, por supuesto, que Xóchitl no tenga broncas con lo de sus plagios.
Debe ser culpa de las chinches lo que ha orillado a Margarita Zavala a volverse a someter a una competencia electoral, como si no hubiera aprendido de su desastrosa campaña presidencial. Lo bueno es que la hija de Chayito Robles va a hacer más osos que ella.
Lo que sí enchincha gacho son aquellos que portando su playera de “¡Genaro, hazme un hijo!”, andan chillando porque AMLO consiguió arrebatarle a García Luna Productions algunos millones de dólares que se había carranceado calderónicamente. Eso sí, supongo que por culpa de las chinches, el expresichente Jelipillo dio una lección en una conferencia sobre cómo se corta la coca y se distribuye de manera profesional.
También le han deber picado muchas chinches a Marcelo Ebrard y su fanaticada, que ya quieren desestabilizar a la Cuatroté con su numerazo de darle en la torre al presupuesto. Marchelo quiere hacer lo que ni Monreal pudo hacer. (Con una pequeña ayuda de Monreal, by the way). Ebrard hace ver a Kinky Téllez como una persona de altas fidelidades.
¡Ni en Ecatepunk quieren a Sandy! ¡Es culpa de las chinches!
