Justo cuando la cosecha de infodemia derechaira demuestra que nunca se acaba y proliferan como moscas en el albañal de las fake news, aparece la señora Rabadán, esa distinguida panista, se fue a Washington en vez de irse a Acapulco a espejear sus prejuicios a la OEA, esa cosa tan fea. Y todo para que el cacique porfiriano y voxista que ahí despacha, el señor Almugre, digo Almagro, convenza a Biden de que desvíe las tropas instaladas en Israel y Ucrania para que intervengan en México. Y es que según ha podido detectar tan fina y culta dama, a través de los medios que no cesan de respaldar noticias falsas (o sea, puros videos e imágenes de otros años o de otros lugares, informaciones absolutamente inventadas de muertos que no están ahí, o melodramas rancheros como los de Palazuelos y mentiras distribuidas alegremente por Morales Lechuga, Krauze y los de la fallidísima Operación Berlín que siguen replicando como si funcionaran sus complós a lo subjefe Diego) el gobierno ha sido negligente en el rescate de Acapulco en particular y de Guerrero en general. Es lo malo de informarse con el doble de Maduro.
Acá el asunto es cómo fue que el señor de la OEA, esa cosa tan fea, haya podido ubicar a la Rabadán tomando en cuenta la larga lista de choznos de Gómez Morín y de don Plutarco que han pasado por ahí a bolearle los mocasines. Además, le tendría que explicar a Almagro, -que en su momento traicionó al enorme Pepe Mújica, cabe decir- que su comportamiento esté cimentado en rabietas y desfases emocionales, resentimientos infantiles. Cómo estará la cosa en su afán por ser como Vicente Vox, hasta en espacios noticiosos donde prepondera su propia banda derechosa, ha sido puesta en ridículo como símbolo del Frente Marchito. Eso sin olvidar su negativa a compartir su dieta con los damnificados de Acapulco, la convierten en una mala personita.
Así, el sector opositor está tan mal que ha recurrido, incluso, a Chayito Robles que cree que porque hizo una Estafa Maestra puede hacer fake news maestras. En su delirio, el PRIANChu aspira a que la Quinta flota pase a saludar a bayoneta calada por Caleta-Caletilla. Para esa banda, la democracia es un adorno corrientito que no hace juego con sus pasiones pinochetistas.
Está bien que la oposición vea que su campeona del huipil no va a saber ni a melón, pero esta clase de estrategias no solo son ramplonas e inútiles, sino bochornosas y ridículas. Amiguis de la oposición, échenle más coco y ganitas.