Nadie puede negar que la marcha, definitivamente organizada por la sociedad civil del pasado domingo fue un éxito, no solo por el número de asistentes a la de la Ciudad de México, sino además por las nutridas marchas a lo largo del país entero, todas con un fin común, defender al Instituto Nacional Electoral y por ende a la democracia y la estabilidad social. Con esta se logra desarticular un golpe al INE y a nuestro excelente sistema electoral disfrazado de reforma, para la cual López necesitaba contar con lo que llamamos “mayoría calificada” en ambas Cámaras para poder realizar reformas a la Constitución Política.
La marcha destacó no solo por lo nutrido, sino que ademas fue respetuosa, sin violencia ni destrozos y dejó un saldo blanco; no asistió ningún borrego manipulado a quien se le tuviera que pasar lista; no hubo camiones con acarreados; no hubo necesidad de repartir lonches o boinas; y lo mejor, sin sobres con Ca$h como están acostumbrados los acarreados de Morena.
El mensaje de la ciudadanía fue claro, y nos deja una profunda reflexión, no hay duda que México ya entendió que López Obrador es un peligro para nuestro país y que cualquier intento de reelección de su parte directa o por conducto de una de sus corcholatas manipulables no prosperará.
Morena tiene la elección de la Ciudad de México perdida, y que una buena alianza ciudadana tiene altas probabilidades de triunfo electoral, por lo que esperamos para el próximo sexenio un gran gobierno de coalición poniendo, como debe ser, al ciudadano y no a los partidos al centro. Por cierto, no se les hace extraño no haber visto a los políticos de “Movimiento Ciudadano” en la marcha. Sí vimos a varios diputados federales quienes aunque son de la bancada de ese partido son más empresarios que políticos, o el caso de Jalisco, ver al director de Pensiones, Héctor Pizano, no nos extraña, ya que siempre ha estado comprometido con las causas sociales, pero al resto de MC, se les extrañó. Hubiera sido bueno verlos por ahí ya que los malpensados opinan que su partido le está haciendo la tarea a Morena para tronar cualquier alianza opositora con peso.
La regla es muy sencilla, si todos los partidos se unen (PRI, PAN, PRD y MC) la elección se gana holgadamente. Si no va MC, solo divide el voto y será un poco más difícil ganar. MC solo no gana la presidencial ni postulando a Colosio como su candidato, menos con Alfaro o Samuel. Ya me imagino de presidente a Alfaro, peleándose a diario con la prensa y con todas las universidades del país.
También se le dejó un claro mensaje al PRI, que debe sin duda apoyar las causas ciudadanas y no volver en forma estúpida, a apoyar propuestas de López como la del Ejército en las calles. La ciudadanía esta muy al pendiente de lo que hacen sus dirigentes, diputados y senadores.
En Jalisco ha sido curioso ver a políticos de todos los partidos en los desayunos que ha venido organizando la agrupación política “Confio en México”, excepto a la dirigente de ese partido, quien inexplicablemente no asiste a ellas. Hasta al delegado del CEN hemos saludado en esos eventos, notando también la ausencia de los de MC, pero lo justificamos por su gran soberbia.
Después de la marcha ciudadana, López se inventa su propia marcha, necesaria para alimentar su enorme ego. Lamentablemente parece que la misma, como amenazó, viene acompañada de una propuesta inconstitucional tendiente a reformar el sistema electoral vía leyes secundarias. Para parar ese albazo en la Corte será necesario contar con los votos de ocho ministros, ¿estarán a la altura de lo que el país requiere?
Héctor Romero Fierro
