Gil no sabía si cerraba la semana o la semana lo cerraba a él. Seguramente lo segundo. Caminó sobre la duela de cedro blanco hasta topar con la bien llamada Mesa de Novedades. En lo alto, aún con olor a tinta fresca: El roce del tiempo. Bellow, Nabokov, Hitchens, Travolta, Trump y otros ensayos (1986-2016) (Anagrama, 2019). A Gamés le gusta el Amis cronista y ensayista: profundo y ligero, serio e irónico, culto y popular. En El roce del tiempo hay una crónica-reportaje sobre la pornografía escrito en el año 2000. Gamés arroja algunos subrayados. Pónganse los cinturones, aquí vamos.
···
Gore Vidal dijo una vez que el único peligro de ver pornografía es que puede hacer que quieras ver más pornografía; puede hacer que no quieras hacer nada más que ver pornografía. Hay además, sostengo, otro peligro. Mientras veía partes de algunas películas extremas en el video de la habitación del hotel, no hacía más que preocuparme algo muy concreto: que pudiera llegar a gustarme. El porno da servicio a lo “perverso polimorfo”: el caos casi infinito del deseo humano. Si albergas una perversidad en tu interior, el porno, tarde o temprano, la descubrirá. Ojalá no te suceda mientras estás viendo una película porno sobre un criador de cerdos coprófago ni sobre alguien que se dedica a las pompas fúnebres.
···
En la actualidad hay dos corrientes dominantes en la pornografía norteamericana: features y gonzo. Las features son películas sexuales con ciertos rasgos comunes con la “narrativa”: escenario, trama, creación de personajes (…). El porno gonzo se conoce también como wall to wall (“sin cuartel”). Muestra a gente follando sin que importen lo más mínimo las razones para hacerlo (…). El porno feature es mucho, mucho más sucio que antes, pero el porno gonzo es gonzo, es decir, despiadadamente transgresor, y el elemento nuevo es la violencia.
···
Comí con Tentadora (porno feature). Comí con Chloe (porno gonzo). Y al día siguiente me reuní con Chloe en el plató de Welcum To Chloeville (juego de palabras: Welcome “bienvenido” y Welcum (cum, semen o venida).
—¿Qué sucede —pregunté— si al hombre no se le pone dura? Tal fiasco solía ser el archienemigo del porno. Que la erección no tuviera lugar podía significar la diferencia entre el beneficio y la pérdida. Pero la situación ha cambiado, me han dicho, gracias al Viagra. El actor, estimulado por el Viagra actuará 45 minutos después de lo planeado, con la cara congestionada y dolor de cabeza. Otra cosa con el Viagra es que el hombre puede tener problemas para eyacular poniendo en peligro el “facial”.
—¿Qué haces entonces, Tentadora?.
—Sorbes un poco de un néctar a base de piña colada. No te la tragas. Tienes el pito en la boca y vas dejando salir la piña colada como si rezumara por todo alrededor.
—¿Cuáles son tus tarifas actuales, Chloe?
—En gonzo no te pagan por película, sino por secuencia. Chica-chica: 700 dólares, más 100 si es con juguete anal. Chico-chica: 900. Anal: mil 100. Un solitario (muy pocas veces): 500. Doble penetración: mil 500.
···
Las cifras del negocio del porno superan a las del rock y las de Hollywood.
—Los norteamericanos gastan más en clubes de strip-tease que en teatro, ópera, danza, conciertos de jazz y música clásica juntos.
—En 1975 el valor de venta al detalle de todo el porno duro en Estados Unidos se estimó entre 5 y 10 millones de dólares. El año pasado (2016), los norteamericanos gastaron 8 mil millones de dólares en sexo “intermediado”.
—Sea lo que sea el porno, haga lo que haga, podremos quizá reprobarlo, pero no hacerlo desaparecer. Parafraseando a Falstaff, si proscribes el porno, proscribes el mundo.
···
Sí: los viernes Gil toma la copa con amigos verdaderos. Mientras el mesero se acerca con la charola que sostiene el Glenfiddich 15, Gamés pondrá a circular la máxima de Woody Allen por el mantel tan blanco: El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores.
Anuncio
Gil tomará unas inmerecidas vacaciones. Breves, ni a melón le van a saber. Gamés regresará a esta plana el lunes 9 de septiembre. No hagan locuras ni vean demasiado porno. Au revoir.
Gil s’en va
