La prensa nacional acaba de informar que a unos días del inicio de las campañas para la elección de jueces, la magistrada Juana Fuentes Velázquez, líder nacional del corporativismo judicial, convocó a los mexicanos a no votar en la elección de jueces del próximo 1 de junio desde la 58 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde dice haber participado.
Según ella: “No se trata de una simple elección judicial, sino de la desaparición de la independencia del Poder Judicial”.
Al respecto, cabe referir que el referido evento de la ONU tuvo lugar del 24 de febrero al 4 de abril de 2025; o sea, hace más de 15 días que concluyó.
En lo que no tengo duda es que probablemente con recursos públicos, los líderes del corporativismo judicial andan por el mundo en busca de reflectores y apoyo para la defensa de sus intereses comparativos, no en defensa del interés público.
Y una vez más aclaro. El Poder Judicial no es independiente, constitucionalmente no lo puede ser. Ninguno de los tres Poderes es independiente, son más bien “interdependientes”. Son autónomos, cada uno posee autonomía de gestión para el desempeño de sus funciones que constitucionalmente les corresponde.
Cada uno de los tres Poderes de la Unión tiene la misma jerarquía, jurídicamente todos, como parte de un solo poder, el poder del Estado, deben mantener una relación de supracoordinación para el logro del bien común.
Los jueces, magistrados y ministros de la Corte son los que deben ser independientes, porque de su independencia depende la autonomía del Poder Judicial.
Y es el caso que un juez solamente puede ser independiente si posee capacidad para tomar decisiones judiciales con fundamentos jurídico-científicos de manera imparcial, sin influencias externas de cualquier tipo, económicas, políticas, ideológicas, religiosas o de cualquier otro tipo.
¿Puede alguien decirme, por favor, cómo un juez dominado por el amor a las riquezas materiales, que juzga en un país pobre y nunca estuvo dispuesto a renunciar a su grandioso salario, que supera al de sus pares en los países del primer mundo, puede ser independiente?