No suben los niveles de almacenamiento de las presas que abastecen el sistema Cutzamala. No obstante a las constantes precipitaciones pluviales que han sido generosas su aportación a estos cuerpos de agua no es suficiente para mejorar los niveles. Las presas de Valle de Bravo y Villa Victoria, principales afluentes de agua del sistema cutzamala siguen a la baja. En su capacidad de almacenamiento.
De acuerdo con el reporte diario “Almacenamiento en Presas del Sistema Cutzamala 2021” de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), hasta el pasado 31 de julio había 292 millones 679 mil metros cúbicos de agua almacenada en los tres cuerpos de abastecimiento. Valle de Bravo, Villa Victoria y El bosque. Las tres estaban por debajo del 47 por ciento de su capacidad.
Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM, han denunciado a lo igual que colectivos sociales ambientalistas, los cortes de agua que se dan a los escurrideros y a los causes de los ríos que abastecen las presas, por parte de los dueños de lagos artificiales, que calculan en más de 200 con una captación de más de un millón de metros cúbicos.
Las lluvias han sido generosas, pero la realidad es que así como llega el agua, es como se dispone para el abastecimiento del Cutzamala, y eso es lo que provoca que no aumente el nivel de almacenamiento.
Por lo que colectivos e investigadores exigen con razón que se ponga un alto a los propietarios de lagos artificiales disponen de escurrideros y ríos que abastecen a las presas.
Esto sin duda afecta a cientos de miles de personas tanto de la región como de la ciudad de México y la zona metropolitana que dependen mayoritariamente del sistema Cutzamala para contar con agua potable.
En la zona de Valle de Bravo y sus alrededores las autoridades encargadas de los organismos han anunciado que mientras no suban los niveles de almacenamiento de las presas, habrá recortes en el suministro y abastecimiento de agua, será parcial y por horas cada dos o tres días.
Expertos en estudios del agua, el problema es delicado, pues no obstante a que han sido generosas las lluvias, continúa el desvío de escurrideros y causes de ríos que abastecen a los cuerpos de agua.
Los responsables de estos desvíos son los propietarios de los lagos artificiales que se han construido en este paradisiaco municipio. Se estima que hay más de doscientos los que acaparan más de un millón de metros cúbicos que mucho le hacen falta a las presas Valle de Bravo y Tiloxtoc.
Los habitantes de las comunidades afectadas han denunciado en reiteradas ocasiones la falta de compromiso de las autoridades, pues las deficiencias del servicio no son de este año, sino de varios años atrás y cada año se agudiza más el problema. Actualmente solo se abastece por horas y en algunas zonas cada cuatro días. Lo que deja en evidencia la escasez del vital líquido en los hogares y los problemas de salud que se pueden tener más adelante.
Eduardo Garduño Campa