Que hoy se registrará en fórmula única, como aspirante a dirigir el PRI estatal, el experimentado Eric Sevilla Montes de Oca, Secretario de Desarrollo Social del gobierno delmacista. Es uno de los personajes en los que, evidentemente, el gobernador mexiquense ha puesto su confianza para sustentar el éxito de su administración, y que ahora estará encargado de la estrategia electoral del tricolor hacia las contiendas que vienen.
El toque juvenil y de género lo tendrán los tricolores a través de la aspirante a la secretaría general, la actual diputada Monserrath Sobreyra Santos, que con menos de 30 años de edad ya ha recorrido la función pública y los congresos federal y estatal.
Que esta combinación tiró muchos cálculos que, en los pasillos del poder, estaban perfilando a otros personajes. Prevaleció el colmillo gubernamental de Del Mazo al conservar a la gente que le está siendo de gran valía dentro del gabinete. Esto, sin embargo, no descarta otros ajustes clave que serán muy interesantes para clarificar el panorama político que trae nerviosos a muchos y a muchas.
Que, hablando de clarificar, al próximo consejo político del tricolor acudirán el propio Alfredo Del Mazo y el líder nacional Alejandro Moreno Cárdenas, fotografía que despejará dudas entre quienes prenden veladoras apostando a un distanciamiento que debilite al partido, apuntando sus redes a un hasta ahora inexistente río revuelto. Más bien, a esos futurólogos tal vez los arrastre la marea.
Que, al parecer, pasarán años y años sin que nadie salga siquiera despeinado por el grosero abuso a las finanzas del Issemym, institución que está en serios problemas económicos y a la que le deben la friolera de 4 mil millones de pesos de cuotas que ayuntamientos y otras instancias públicas retuvieron a sus trabajadores y jamás fueron entregadas al Instituto.
Ahora, ante la situación, tranquilamente se ajusta el Código Financiero y la Ley de Ingresos para que se firmen convenios a 15 años; y todos a gusto, que aquí no ha pasado nada con el dinero que alguien –nadie sabe, nadie supo- jineteó alegremente durante años. No se les toca ni con el pétalo de una responsabilidad administrativa y mucho menos penal.