Esta semana celebraremos el 84 aniversario de la fundación del Partido Acción Nacional. Los días 14, 15, 16 y 17 de septiembre de 1939 fueron la culminación del arduo trabajo que durante varios años desplegaron Manuel Gómez Morín y Efraín González Luna, entre otros mexicanos ilustres, para construir una alternativa democrática y pacífica, y que rindió sus frutos en la Asamblea Constituyente de Acción Nacional.
Acción Nacional nace como “una organización permanente de todos aquellos que, sin prejuicios, resentimientos ni apetitos personales, quieren hacer valer en la vida pública su convicción en una causa clara, definida, coincidente con la naturaleza real de la Nación y conforme a la dignidad de la persona”.
Acción Nacional nace a la vida política de nuestro país como una opción, la única opción, de hecho, democrática, quizá el primer partido realmente moderno y abierto en donde los ciudadanos libres hicieron valer su voz, en un país donde el partido político dominante era el Partido de la Revolución Mexicana (antecedente del actual PRI), que aglutinaba todo el poder político en los años finales de la revolución, apostando por el control colectivo de los obreros, campesinos, militares y, en general, de la clase política, dejando sin espacios a la oposición.
Ante aquel México autoritario, Acción Nacional nació con el objetivo de crear conciencia ciudadana sobre los grandes problemas nacionales y formar ciudadanos que participen en su solución. Desde entonces, priorizamos el bien común y el orden jurídico y político de la nación mexicana, partiendo del reconocimiento de la persona humana como único centro de la actividad política, reconociendo la dignidad que por naturaleza le es inherente al ser humano, y esto es a lo que llamamos el humanismo político.
Con la base sólida de este humanismo, Acción Nacional es el único partido político en México que tiene una doctrina bien definida, la cual permanece como elemento rector de Acción Nacional desde 1939, ajustándose al paso del tiempo a través de la proyección de sus principios.
Desde dicho papel, en el PAN se impulsaron grandes temas de interés nacional, como el voto de la mujer, las grandes reformas políticas y electorales de nuestro país, la autonomía de instituciones y la creación de instituciones como el IMSS, por mencionar algunas. Acción Nacional también impulsó las grandes batallas ciudadanas por la democracia en Chihuahua, Baja California y Guanajuato; y, por supuesto, las grandes reformas que han permitido al país salir del subdesarrollo para entrar a la modernización.
Ciertamente, Acción Nacional no está exento de los errores que puedan cometer sus militantes.