Ayer se cumplieron seis años del primer debate entre los entonces candidatos a la gubernatura de Tamaulipas.
A diferencia de ahora que son tres, en 2016 fueron ocho los contrincantes.
En ese primer ejercicio, Francisco García Cabeza de Vaca acusó al candidato priista Baltazar Hinojosa Ochoa de ser parte de un partido corrupto.
“Hoy estamos ante dos caminos, el pasado o el futuro; regresar al pasado es regresar a esos gobiernos que hoy en día son los responsables de que Tamaulipas ocupe el primer lugar en secuestros, extorsiones y el nada honroso primer lugar en desaparecidos”, dijo el panista.
Aseguró que Tomás Yarrington era el patrón de Baltazar Hinojosa, y este último, por cierto, ahora apoya el proyecto Va por Tamaulipas (PAN, PRI, PRD) que busca impedir a toda costa la llegada de Morena al poder estatal.
Seis años después, hoy el PAN vuelve a pedir “no regresar al pasado”. ¿No se supone que el pasado es el PRI y ellos lo llevan de aliado?
En el debate hace seis años participaron, además de Baltazar y el panista Cabeza de Vaca, el perredista Jorge Valdez, Armando Vera por el PT, Gustavo Cárdenas de Movimiento Ciudadano, Héctor Garza por Morena, Abdíes Pineda del PES y el independiente que luego se adhirió al PAN, Francisco Chavira Martínez.
De ese primer debate, los partidos chicos pusieron el ejemplo, pues hicieron su tarea y llevaron cifras y estadísticas en temas de seguridad y justicia.
Armando Vera, ya fallecido, propuso que el nombramiento del secretario de Seguridad y el procurador vinieran de una convocatoria abierta a los miembros de las fuerzas armadas y los profesionales del derecho. Nada mal.
Héctor Garza acusó que Egidio Torre Cantú no había comprobado más de 200 millones de pesos en recursos de seguridad pública de 2012 y 2013.
Abdíes Pineda lamentó que las carreteras del estado tuvieran que ser recorridas en caravanas custodiadas por elementos federales. “He visto la angustia por no poder salir a las calles después de determinada la hora”, dijo.
Américo Villarreal Anaya, César Verástegui Ostos y Arturo Díez Gutiérrez debaten este domingo y es iluso pensar que no habrá ataques personales, aunque los tamaulipecos solo quieren escuchar propuestas.