La buena: hasta que por fin se voltea a ver el problema de la obesidad infantil.
La mala: fue en el estado de Oaxaca, no en Tamaulipas.
La peor: no se piensa traer a la entidad la prohibición de vender refresco y comida chatarra a los niños.
A principios de junio, en un reportaje de mi compañera Leticia Gutiérrez se puso el dedo en la llaga:
El confinamiento domiciliario protege del contagio del virus SARS-CoV-2, pero viene también a acentuar los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo, golpeando a los más vulnerables frente a la ansiedad de comer, los menores del hogar.
En México, la obesidad infantil afecta a uno de cada tres niños menores de 11 años, lo que trasladado a Tamaulipas significa un estimado de 44 mil 442 infantes con esta condición de salud.
Para darse una idea de la dimensión que toma este problema, el estado acumula tres primeros lugares a nivel nacional en obesidad.
Es primero en la clasificación de niñas, adolescentes y jovencitas de 12 a 19 años con este padecimiento y ocupa la tercera posición en cuanto a escolares masculinos de cinco a 11 años.
Es primer lugar en obesidad de hombres mayores de 20 años y también en obesidad abdominal masculina, de acuerdo con los resultados de la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición.
El pediatra endocrinólogo y obesólogo Salvador Ruiz Pérez no tiene dudas: se trata también de una pandemia y sus consecuencias serán aún mayores que las del coronavirus en nuestro país.
Los focos rojos ya estaban encendidos, al grado que este profesionista atiende a niños de tan solo 11 años de edad que ya padecen diabetes tipo 2 como resultado de inercias de malos hábitos en sus hogares.
Es ahí donde se origina todo, dice, pues la infancia tiene derecho a una alimentación sana, pero el 80% aprende con el ejemplo y solo un 20% con lo que se les dice.
El especialista advierte que a causa de la contingencia sanitaria por covid-19, las cifras de sobrepeso y obesidad se van a disparar y esta curva será imposible de aplanar.
Se calcula que para el año 2050, solo uno de cada 10 mexicanos tendrá un peso normal, de acuerdo con un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública.
El enemigo central está en casa, donde se come más, se hace menos ejercicio y se pasan largas horas frente al televisor y los celulares. _