Este viernes llega la Presidenta Claudia Sheinbaum para atestiguar la emergencia que enfrenta el sur de Tamaulipas a consecuencia de las lluvias que dejó la tormenta tropical “Barry”, un fenómeno meteorológico que resultó más dañino pues aunque no impactó directamente la zona, sí la perjudicó con la lluvia que cayó en otros lados.
Su presencia es una buena señal porque confirmará la afectación por el exceso de agua en los niveles de los ríos Tamesí, Guayalejo y Pánuco y se espera que haga un anuncio importante para apoyar a las familias damnificadas en la zona, tal como lo hizo en Reynosa.
La Presidenta de México encabezará una reunión privada en el Centro de Mando de la Primera Zona Naval, donde se le presentará una evaluación de los daños causados por “Barry” en todos los frentes.
En el sur del estado ha permanecido los últimos días su coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa que ha traído a funcionarios estatales y municipales muy enfocados en las tareas que les competen.
Sheinbaum Pardo no deja solos a Tampico, Madero y Altamira en esta contingencia y con ello muestra la sinergia con el gobernador Américo Villarreal Anaya.
Y aprovechando el viaje, la Presidenta habrá de supervisar la aplicación del programa “Salud Casa por Casa” en Madero y el equipamiento del área oncológica del Hospital General IMSS-Bienestar.
Con “Barry”, la naturaleza dio una “pequeña probadita” de su poder destructor, dejando una advertencia de que las cosas se pueden complicar mucho si no estamos preparados.
Son fenómenos que no se pueden evitar pero lo que sí se puede hacer es generar cultura de prevención, por ejemplo con simulacros de evacuación en zonas vulnerables por el lugar donde se ubican.
Hay que darle más importancia a la Protección Civil. Destinarle el debido presupuesto para contar con recursos materiales y humanos suficientes.
Aunque hasta ahora la zona conurbada ha librado el impacto de fenómenos meteorológicos de gran intensidad después del huracán Hilda, en materia de protección civil es la zona más vulnerable por desbordamiento de cauces de ríos y lagunas.