¿Cuánto puede ocultar un canciller de sus negociaciones con la Casa Blanca a la embajadora de México en Estados Unidos y, por lo que dice la embajadora, hasta al presidente de México?
Ya sabíamos por un libro que Ebrard había apartado a la embajadora Martha Bárcena y había puesto a su amigo Javier López Casarín a negociar varias cosas de importancia.
Ahora, el ex secretario de Estado Mike Pompeo ha dicho que Ebrard negoció con él el programa Quédate en México y que Ebrard aceptó a reserva de que no se dijera qué había aceptado.
Ebrard dice que eso no es cierto.
Pero la ex embajadora Bárcena dice otra cosa. Cito del pódcast de Univisión que hace León Krauze.
“Mira, el programa Permanezca en México o Quédate en México existió antes de la amenaza de imposición de aranceles por migración y yo creí que había sido una decisión unilateral de los Estados Unidos porque nunca fui enterada y esto lo dice Mike Pompeo y es cierto que se estaban llevando a cabo negociaciones entre Ebrard y Pompeo y entre Ebrard y Kirstjen Nielsen (ex secretaria de seguridad nacional de EU) y como lo dice el libro Guerras en la frontera, después por México estuvo negociando un señor llamado Javier López Casarín con la gente de Kirstjen Nielsen. A mí lo que me dice Ebrard un día antes de que yo comparezca ante el Senado, me dice, ven a mi oficina para que mañana no te pesquen en curva te quiero informar que Kirstjen Nielsen nos acaba de avisar que mañana va a decir que van a poner en práctica una parte de su ley de migración y nos van a empezar a regresar solicitantes de asilo…”. Ebrard le pide su opinión, Bárcena le dice sus objeciones y se va al Senado “…y al salir del Senado tengo más de diez llamadas telefónicas de un alto funcionario de Palacio Nacional preguntándome que qué era lo que estaban anunciando los americanos, que si yo tenía idea. Le dije: no tengo idea y después ya en Estados Unidos, en diversas conversaciones con Kirstjen Nielsen, con otros funcionarios, me decían, pero es que ya lo acordamos con Ebrard y yo seguía no, pues es que esto es unilateral, porque eso es lo que me decían de México, hasta que apareció el libro Guerras en la frontera y ahora las memorias de Pompeo, en donde yo simplemente ratifico que siempre se me engañó y que se me engañó en el sentido de no decirme que esto había sido un acuerdo, una negociación entre Ebrard y Pompeo y Nielsen”.
Creo que hay negociaciones que debe hacer el canciller. El problema es si informa de ellas.
Carlos Puig