Hoy se cumple un año de la infame invasión de Rusia a Ucrania. Aniversario que llega con sucesos muy importantes, pero también muy peligrosos. En un despliegue de músculo político, audacia y vitalidad física (tiene 80 años), el presidente de EEUU, Joe Biden, sorpresivamente visitó Kiev, la capital ucraniana. Esta visita manda dos poderosos mensajes: que Rusia perderá la guerra y saldrá debilitada (humillada), y que Biden buscará su reelección en 2024.
Aún previo a la visita de Biden, la guerra iba muy mal para Vladimir Putin, al grado de recurrir ya no a sus soldados convencionales, sino a los mercenarios del inefable grupo paramilitar Wagner (que también apoyan y cuidan a Nicolás Maduro en Venezuela, por cierto).
Hoy día Rusia ha perdido una quinta parte del territorio controlado en Ucrania; han muerto entre 40 y 60 mil soldados rusos, según estimaciones del Ministerio de Defensa de Reino Unido; la población rusa a favor de la guerra pasó de 57% en julio a solo 25% para finales de 2022 (t.ly/elD2). Putin no ha logrado lo que prometió.
Por el contrario, la mayoría de estadounidenses apoya la estrategia de Biden para seguir suministrando a Ucrania de armas (65%), enviar ayuda económica (66%), aceptar a refugiados ucranianos (73%) y continuar con las sanciones a Rusia (75%) (t.ly/EDDF). Que el presidente norteamericano haya visitado Ucrania en esta coyuntura tan simbólica asegura que harán lo que se tenga que hacer, cueste lo que cueste, para derrotar a Rusia.
Por otro lado, el principal obstáculo de Biden para buscar su reelección no se llama Donald Trump, sino su edad. Para sus detractores, ya no tiene ni la concentración mental ni la vitalidad física para buscar un segundo periodo (sería el presidente más longevo en la historia de EEUU). Para contrarrestar esta imagen Biden tenía que hacer una demostración de fuerza, e hizo dos: dio un discurso muy enérgico en el Estado de la Unión y visita, a manera de héroe, un país que resiste con uñas y dientes ante los deseos de un dictador.
La visita de Biden a Ucrania marca el inicio de su campaña para 2024, y Putin le está pavimentando el camino a la reelección. Nadie sabe para quien trabaja.
Iván Moreno
Twitter: @carlosivanmoren