Los días pasan y la famosa 4T no termina de carburar, nuestro mandamás se ha vuelto una fábrica de pretextos para cualquier situación que no le convenga aclarar.
Es mucha la desilusión que se percibe entre la gente por los constantes desatinos que se suceden día a día en este gobierno.
Sin embargo, no es la política exterior de nuestro país con la exigencia de disculpas al reino español o la multicitada cancelación de un aeropuerto lo que tienen en vilo al país.
Tampoco lo es las desafortunadas declaraciones de funcionarios de primer nivel dando traspiés y demostrando una carente falta de conocimiento y mesura al hablar.
La cancelación de apoyos, como el programa prospera o las estancias infantiles, pesan en la sociedad, pero tampoco representan la preocupación máxima.
A todo lo mencionado, podemos añadir un buen número de desatinos, conferencias matutinas desangeladas, el perpetuo discurso de los conservadores y la mafia del poder, en fin, estamos frente a un gobierno con un discurso repetitivo, con falta de oficio, falta de carácter y para acabarla de amolar con un presidente que solo busca el reflector para terminar haciendo gala de sus frases floridas.
Una de las prioridades de cualquier gobierno es la seguridad de sus gobernados, y en este renglón, las cifras son verdaderamente alarmantes. La violencia en México ha alcanzado cifras récord en el primer trimestre de 2019.
Se han registrado 8,493 homicidios en lo que va del año. AMLO indica que todo es herencia del pasado, su gobierno como siempre nada tiene que ver en esta situación, la multicitada guardia nacional es la respuesta inmediata a esta situación, un nuevo cuerpo de seguridad con una naturaleza visiblemente militar.
Aunque durante su campaña acusó a los ex presidentes Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto de impulsar estrategias de seguridad violentas de la mano de la Fuerzas Armadas, una vez que comenzó su gobierno, ha sugerido de igual forma un plan militar para la seguridad pública. A México le duele, las miles de vidas pérdidas, las excusas no alcanzan a sanar estas heridas.
La violencia no es exclusiva de este gobierno, no es culpa de AMLO, pero tampoco se vale que a 4 meses de tomar el control del país sigan siendo los pretextos la mejor estrategia contra la violencia.