Kirk Castillo, periodista de Canal 6 Laguna escribió el miércoles pasado en el grupo:
"Lucero, afuera de mi casa, me está diciendo mi esposa que se robaron a una niña, ya dieron aviso a la policía... Supuestamente la sacaron de una camioneta ¿Andas por aquellos rumbos?" Y ahí se desató la locura.
Lucero efectivamente estaba atendiendo el reporte de una aparente violación (que nunca fue confirmada, pues solamente recibieron un reporte en el 911), así que fue el mismo Kirk quien se trasladó de Gómez Palacio hacia la colonia Rincón La Merced al oriente de Torreón.
Cuando Kirk llegó al lugar (seguramente cerca de su casa) el Telediario Matutino estaba a punto de finalizar, Valeria Barquera (mi compañera conductora) hizo enlace con Kirk y dio los primeros avances en los que el periodista relataba la manera en la que supuestamente la menor había sido sustraída de la camioneta de su madre.
Las primeras versiones apuntaban a que Marisol Aguilar había salido de casa con su hija Jimena para dejarla en el colegio, la subió al coche y avanzó algunas cuadras hasta un puesto de comida para comprarle el desayuno, la mujer aseguró que le había prestado un celular para que la niña viera videos mientras bajaba a comprar unas "gorditas" (que siempre se las tienen listas).
Marisol decía que ella no perdió de vista a la niña mientras esperaba el pedido en la fonda, cuando le entregaron los alimentos regresó a la camioneta y para su sorpresa Jimena no estaba. Inmediatamente la mujer comenzó a gritar y a pedir ayuda, por fortuna tuvo respuesta de los pocos comensales del puesto de gorditas y de los vecinos, decidió correr algunas cuadras para buscarla sin respuesta, le llamó a su hija (que vive cerca del lugar) para después ir a su casa para notificarle a su esposo.
Marisol estaba "ciega" y desquiciada (cualquiera lo estaríamos), porque no se dio cuenta que Jimena siempre estuvo en casa, es decir, Marisol no recordó que cuando subió a la chiquita al coche, regresó a la casa a dejar alguna cosa o a recoger cualquier otra, en ese momento casi imperceptible, Jimena (que vive con Síndrome de Down) decidió bajar con su mamá y fue al patio de su casa donde le gusta jugar.
A partir de ahí, la locura total, la madre dándole el celular, viéndola desde el puesto de las gorditas, las autoridades en la zona, la transmisión alargada del Telediario en la que transmitimos los datos y la fotografía ¿Y Jimena?
En el patio de su casa jugando, muy quitada de la pena.
Por fortuna se trató de un malentendido que puede ocurrirle a cualquiera, pero lo verdaderamente interesante fue la red que logramos construir, minutos después del reporte (porque esos momentos son claves), bien por la madre desesperada, bien por la esposa de Kirk, bien por los vecinos, autoridades y los medios de comunicación en general.
Nota: Yo me sentí recompensado por el beso que Jimena me acomodó al aire.
