¿Qué vamos a hacer hoy? Luchar con uñas y dientes por poner Star+ y mirar el estreno de la miniserie The Dropout.
¿Por qué? Porque es una de las mejores propuestas a nivel contenidos que podemos encontrar en este momento, una suerte de Gambito de dama, pero más fuerte, reveladora, actual.
Yo no sé si usted ubique a Elizabeth Holmes, pero, para acabar pronto, inventó algo que iba a revolucionar la historia de la humanidad, se hizo multimillonaria en muy poco tiempo y es mujer.
The Dropout es su historia y no sabe usted qué cosa tan más aterradora, contradictoria y adictiva. Nada que ver con nada que usted esté viendo.
Tuve el privilegio de ver este material y todavía no puedo creer todo lo que pasó aquí, el morbo, las lecciones.
Porque esto pega en nuestros sueños, afecta nuestras aspiraciones y escandaliza de principio a fin.
Me fascinó. No lo puedo decir de otra manera. Y la puesta en pantalla es un espectacular viaje de un pasado no muy remoto donde se les decía a los millennials casi, casi, que ellos iban a salvar a la humanidad para el año 2022.
La protagonista de este proyecto es Amanda Sayfrield de Mamma Mia!, Big Love y mil conceptos más.
No hay manera de verla y de no celebrarla. No sabe usted qué actuación más más increíble. Sería muy injusto que no la terminaran premiando con algo importante.
Por si esto no fuera suficiente, a su lado hay puras megaestrellas de Hollywood y el talento cinematográfico de genios que estuvieron detrás de títulos como Killing Eve.
¿Qué vamos a hacer hoy? Luchar con uñas y dientes por poner Star+ y mirar el estreno de la miniserie The Dropout. ¿A poco no?
Zombis
Ya que estamos en Star+, quisiera que habláramos de The Walking Dead.
Como usted sabe, esta plataforma tiene en exclusiva lo nuevo de ésta, una de las series más famosas de todos los tiempos.
Según yo, vamos con una semana de diferencia respecto a Estados Unidos. Estamos viendo la segunda, de tres partes, de la temporada 11.
Luego nos peleamos sobre esta peculiar estrategia de “me voy, pero me quedo”, de “esto ya no se parece a lo era cuando comenzó en 2010” y de “¿Y dónde quedaron mis protagonistas?”
Yo, como millones de personas en todo el mundo, no me pierdo ninguno de lo episodios de este cañonazo cada vez que salen y hay algo que le tengo que preguntar:
¿La gente que hace The Walking Dead se esmera en crear un espejo de lo que la humanidad está viviendo en ese momento o somos nosotros que no podemos evitar adjudicarle cualidades simbólicas a esta producción de AMC?
Es que le juro que los capítulos que se están estrenando son el perfecto retrato de lo que está pasando entre “la reconstrucción del mundo que teníamos antes (de la pandemia)”, la guerra y hasta las atracciones de circo tipo Guillermo del Toro.
Se necesita una visión muy privilegiada para anticipar todo esto y todavía más para transformarlo en entretenimiento. En los nuevos capítulos de The Walking Dead pasa todo esto y más.
Pero, además, pasa bien. Es una serie bien escrita, bien actuada, bien dirigida. Un concepto que nos recuerda lo que era la televisión antes del “streaming”. Una idea que, por increíble que suene, ayuda.
Busque lo nuevo de The Walking Dead en Star+. Le va a gustar. De veras que sí.