Los comercios en Tampico y la zona sur de Tamaulipas reconocieron el recorte de personal durante los últimos meses, con casos donde hasta la mitad de su plantilla laboral fue despedida, siendo la única opción de supervivencia al estar agobiados por los altos costos de los servicios básicos y poder cubrir los sueldos con aumentos anuales.
De la misma forma, indicó Juan Ángel Paredes Espinoza, consejero de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco), otros empresarios determinaron reducir sus instalaciones y ponerlas en venta o en renta. Todo lo anterior se convirtieron en soluciones a fin de mantenerse vigentes en el mercado.
“Hay empresas que nos hicimos más chiquitos, es decir, se debió reducir la nómina, cuando éramos negocios con crecimiento en la fuerza laboral. Ya no podemos hacernos menos porque operamos con el mínimo necesario de personal para la operación. Algunos establecimientos contaban con más de 100 empleados y ahora cuenta con la mitad”, declaró.

Lo anterior repercutió en la fuerza laboral registrada ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Hasta mayo del presente año trae una caída de 0.7 por ciento, con 5 mil 277 posiciones perdidas al acercarse el primer semestre. Los duelos de negocios del giro terciario explicaron los motivos de estas disposiciones.
“Todo esto viene derivado de la complicación para solventar los costos de energía eléctrica, de agua, el pago de renta de local, salir adelante con los sueldos. Los propietarios prescinden de los trabajadores a fin de salir adelante e incluso puede tener un poco de utilidad. Otros reducen sus locales y lo rentan, pues todo ese piso es gasto que no genera ingresos”, expuso el consejero de Concanaco.
Paredes Espinoza añadió que esto también le pega al servicio. Por ejemplo, antes un cliente llegaba y había empleados que se peleaban por atenderlo. Ahora, acuden tres consumidores y solamente uno se encarga de darles dicho servicio, al lado de que quien desea adquirir un producto se va por la pérdida de tiempo.
“Nos tuvimos que adecuar en nuestras instalaciones. Los pisos debimos recortarlos hasta la mitad para esa infraestructura ponerla en venta o en renta, situación que sí nos ha beneficiado pues se le ha sacado provecho a esos espacios”, concluyó.