En noviembre de 2022 las remesas familiares sumaron 4 mil 801 millones de dólares, lo que significó una caída de 10.4 por ciento, en comparación con el monto registrado en octubre; al respecto, Banco BASE advirtió que la contracción fue mayor a la esperada y se espera que los flujos del exterior crezcan a un menor ritmo en 2023.
La institución financiera indicó que las remesas de noviembre también mostraron una desaceleración del crecimiento a tasa anual, explicada por la caída del número de operaciones, lo que señala el riesgo inminente que en 2023 crecerán a un menor ritmo, dada la desaceleración de la economía de Estados Unidos.
Banco BASE resaltó que el crecimiento sostenido de las remesas no es un logro de la economía mexicana, pues se trata de transferencias de valor generado en el extranjero, principalmente en Estados Unidos.
Señaló que con el dato de remesas publicado a noviembre, se proyecta que 2022 cerrará con un flujo de remesas de 58 mil 290 millones de dólares, que implicará un crecimiento de 13 por ciento, con respecto a 2021.
Para 2023, añadió Banco BASE, se proyecta un crecimiento anual de las remesas de 7.4 por ciento, superando un flujo de 60 mil millones de dólares. El crecimiento esperado para 2023 es menor al esperado para 2022, debido a que es elevada la probabilidad de recesión leve en Estados Unidos.
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