Ante la reactivación de las redadas en Los Ángeles, miembros de la comunidad migrante y organizaciones sociales realizan este martes una jornada de paro para exigir que se cumpla la orden judicial de suspender los operativos de ICE por perfil racial.
Desde esta mañana se convocó a no comprar en tiendas como Home Depot, Walmart o Target y consumir local, además de no acudir al trabajo.
Cientos de personas se manifiestan en el parque McArthur, muy cerca del Home Depot en el boulevard Wilshire donde ocurrió la primera redada en esta ciudad y la más reciente, apenas el pasado 6 de agosto.
"No vamos a ir a los restaurantes de comida rápida donde explotan a los trabajadores migrantes, somos la esperanza, somos América y no nos vamos a dar por vencidos", fue la consigna lanzada por la activista Eunice Hernández, durante el mitin que se lleva a cabo esta mañana.
Con pancartas y banderas binacionales, los convocantes han advertido que Los Ángeles se enfrenta a tiempos muy difíciles ante el acecho de los agentes de migración que detienen indiscriminadamente a personas en los estacionamientos de las tiendas departamentales.

Angélica Salas, directora de Chirla, reclamó que el Departamento de Seguridad Nacional no haga caso de la suspensión judicial a las detenciones arbitrarias, a partir de una orden judicial promovida, entre otras por esta organización defensora de derechos humanos.
Se espera que la jornada se prolongue a lo largo del día con el llamado a no acudir a las tiendas como protesta por la permisividad que han tenido con los agentes de ICE para detener gente en sus estacionamientos.
Mientras se lleva a cabo el mitin en el parque MacArthur, afuera del Home Depot de Wilshire, decenas de jornaleros aguardan en las jardineras del estacionamiento, a la espera, como cada día, de conseguir trabajo.
ROA