En lo que va del año, el área de plazas y mercados de Torreón, Coahuila, detectó cerca de 14 locales que entorpecen el paso y la vista de los peatones en algunos puntos del Centro de la ciudad, según información del jefe del área, Víctor Ramos, motivo por el cual unos han sido retirados, reubicados o reducido para dejar libres las banquetas y dar acceso a cientos de personas que transitan todos los días por el primer cuadro de la ciudad.
En este punto de la ciudad, se reúnen ciudadanos de Torreón, Matamoros, San Pedro, Coahuila, Gómez Palacio y Lerdo, Durango, no solo porque se encuentra una gran variedad de comercios, sino porque también se encuentran diversas rutas de transporte público que llegan a las diferentes vialidades que conforman el Centro de Torreón.

Sin embargo, entre los comercios se encuentra el área informal y los locales ambulantes, algunos distribuidos en locales sobre la calle Valdés Carrillo, desde la avenida Carranza hasta la avenida Juárez, y otros colocados entre las banquetas y las calles reduciendo de alguna forma el espacio para el libre tránsito de quienes circulan por las calles, niños, personas de la tercera edad o con capacidades diferentes.
La invasión a las banquetas también ha provocado algunos accidentes como atropellamiento sobre la avenida Hidalgo y la calle Múzquiz frente al Mercado Alianza, los incidentes fueron algunas de las razones para la regularización de este tipo de negocios en Torreón, y aunque no todos los comerciantes estuvieron de acuerdo, hubo otros que acataron las medidas sin ninguna problemática.
“Había lugares donde definitivamente obstruía totalmente el paso de los peatones, en la Hidalgo y Múzquiz se retiraron dos puestos de ahí, se reubicaron, se retiraron y les dimos la oportunidad a los propietarios que busquen otro lugar, pero ahí ya no podían estar porque ya era un problema de Vialidad y Tránsito de las personas. Claro que ha generado conflictos porque al no atender la notificación cuando ven que retiramos”, explicó Víctor Ramos.
Pero hoy los puestos y las banquetas estrechas representan un problema, al menos para aquellos que requieren de ayuda para caminar y deben realizar las compras para su casa o realizar otros trámites, como José Francisco Chacón a quien conocen como Pepe, es una persona con capacidades diferentes y utiliza una moto eléctrica para poder suplir parte de sus necesidades básicas, como lo es hacer su despensa, ir al banco o realizar otras compras.
“Por ahí tengo que pasar, no hay de otra”
En un recorrido durante la tarde de un día entre semana acompañamos a Pepe desde el bulevar Revolución por la calle Acuña hasta la avenida Morelos y después a la calle Valdés Carrillo hacia un cajero para retirar un dinero, es una actividad común, sin embargo, muchas veces Pepe transita hasta el mercado Alianza enfrentado no solo la gran cantidad de peatones, también el reducido espacio de las banquetas y las malas condiciones en las que se encuentran.
Al iniciar el recorrido por la calle Acuña, Pepe no tiene espacio para desplazarse por la banqueta, en uno de los costados el terreno es irregular y su vehículo no podría avanzar por el lugar, mientras que en el segundo costado hay una ligera banqueta de unos 60 centímetros que se hace más angosta, por ello transita por la calle hasta llegar a la avenida Carranza en donde puede tomar la banqueta.
A pocos metros de llegar a la avenida Hidalgo, los estanquillos complican el paso y aunque no hay más personas alrededor, Pepe es el único que puede pasar por ahí, es sobre la avenida Juárez hasta la avenida Morelos en donde se puede transitar más fácil por una de las banquetas debido al espacio y que no hay puestos ambulantes.
La avenida Morelos es principalmente peatonal, por lo que caminar hasta el banco en la calle Valdés Carrillo es muy sencillo, Pepe demoró tan solo unos minutos en el banco y luego sale para dirigirnos por la misma calle hacia el sur, ahí es donde se ve el resultado del espacio de los locales ambulantes, quienes meses atrás tenían productos no solo junto a su local sino frente a ellos, acortando el espacio para las personas.
“Siempre opto por orillarme al ir en las banquetas, ahí normalmente caminan menos personas, pero aun así, siempre procuro tener cuidado, pues para no atropellar a las personas, o me detengo a esperar a que pasen”, comenta Pepe cuando llegamos a la avenida Hidalgo, otro punto en donde los negocios se ven diferentes, si antes los peatones solían bajar a la calle para esquivar los productos que salían por la banqueta, ahora podríamos pasar sin complicaciones con Pepe, sin embargo, la mala condiciones de la calle se lo impiden y Pepe debe regresar a la calle para burlar los baches.
Un comerciante en el sitio opina que caminar por ahí es más sencillo desde que regularizaron el espacio y de esa forma todos pueden ofertar sus productos en igualdad de condiciones.
“Estaba extendido un metro y nos lo redujeron a la mitad, desde mi punto de vista está bien, pasa la gente y todos nos vemos, la persona va pasando y va viendo todos los puestos, cuando estaba desordenado el metro, había gente que tenía de más y no dejaba mirar para atrás ni pasar, las cosas todavía se pueden colgar, pero medio metro, hay muchos que no piensan lo mismo, la persona que tiene, quiere tener más, para mí está bien y no hubo ninguna afectación en mi negocio, pero a veces es abuso, y por mí con que sea parejo para todos”, dijo a Notivox el comerciante Carlos Camarena.
Debido a que Pepe también suele frecuentar el Mercado Alianza caminamos con dirección al poniente por la misma Avenida, él reconoce que actualmente es más sencillo caminar por las banquetas con la reducción de espacio de los locales, pero es durante diciembre cuando el tránsito se complica mucho más y Pepe debe transitar en la calle para poder llegar a donde quiere.
“Por lo regular yo me muevo en el Mercado Juárez, al banco y las necesidades que se me presenten ya voy en mi moto, si hay horas, fechas en las que se aglomera la gente aquí en el Centro y yo tengo que ir cuidando de no golpear a la gente, buscar la forma de esquivar, también que las banquetas estén en buen estado y las rampas porque hay muchas que están ya deterioradas y se dificulta en mi moto para poder acceder, tengo que bajar a la carretera y buscar otra rampa para seguir transitando por la banqueta. La temporada más complicada para transitar es noviembre y diciembre, se llena todo de puestos y solo pasa una persona. Yo paso, pero con mucho cuidado para no tirar nada de los puestos porque tendría que pagarlo también”, expuso Pepe.
Transitar por el resto de la avenida si es complicado, Pepe debe esperar a que pasen los grupos de personas y que no venga nadie más para poder continuar su marcha debido a la presencia de otros puestos, y cuando llegamos a la avenida Zaragoza, los propietarios de un local de accesorios para celular preguntan si las fotos que le están tomando a Pepe va a tener alguna repercusión para ellos.
Regresar representa la misma complicación, esperar a que pasen las personas y esquivar baches en las mismas banquetas, y al tomar la calle Acuña para cruzar el bulevar Revolución y despedirnos de Pepe, es el mismo riesgo cuando tiene que ir por un costado de los carros porque es imposible ir por la banqueta.
“Si se ha regularizado la distancia del paso peatonal en las banquetas, si han puesto atención a eso porque si le dan buen espacio para que haya cruce de ida y vuelta de las personas, entonces si hay forma de que tú circules en un carril, antes era más complicado porque abarcan más espacio sobre las banquetas (los puestos), y ahora se está regularizando, si hay forma de circular no tan bien, pero a gusto de perdido para no entorpecer con los mismos puestos”, comentó.
En su experiencia, anteriormente a la regularización de los comercios, Pepe señala que uno de los puntos más problemáticos era el Mercado Juárez sobre la avenida Hidalgo, ya que los puestos abarcaban una gran cantidad de espacio, hoy quedan algunos retos para la movilidad digna para todos los peatones, y es que todas las banquetas cuenten con el espacio adecuado, y mejores condiciones en el asfalto, así como en las rampas.
“Tenemos banquetas muy reducidas y lo único que se puede hacer es bajar a la carretera y con mucho cuidado para que no te atropellen, es un riesgo, pero ese es el paso y por ahí tengo que pasar, no hay de otra, se requiere atención de las autoridades para que regularicen y que quienes ya están en los locales tengan sus banquetas en buen estado”, puntualizó Pepe.
Como anteriormente se señaló, las malas condiciones de las banquetas y la falta de espacio lleva a los transeúntes a bajar a las banquetas enfrentando riesgos, Víctor Ramos, relató que respecto a los puestos de la calle Múzquiz y la avenida Hidalgo, la Dirección de Tránsito y Movilidad Urbana ya había presentado reportes de algunos incidentes en la zona.
“Ya teníamos reporte de la dirección de Vialidad, desgraciadamente cuando lograba pasar la gente, prácticamente llegaban y chocaba con los camiones que iban de paso, no dejan espacio, entonces ya teníamos varios reportes de incidentes que ya estaban poniendo en riesgo la vida de los peatones”, finalizó el funcionario.
Por ahora, el área de Plazas y Mercados tiene detectados otros puestos que obstruyen el paso en las banquetas, los cuales ya están notificados para su regularización, que se reubiquen o recorten su espacio. En caso de no hacerlo, serán retirados.
daed