Danna de tan solo cuatro años, fue asesinada el pasado lunes primero de septiembre, presuntamente por su padrastro, en Monterrey, Nuevo León. Su abuela busca sepultarla en Minatitlán, Veracruz, donde la cuidó durante tres años y hoy llora por su muerte. La madre y el padrastro fueron detenidos como presuntos responsables, el mismo día.
La menor era cuidada por María del Carmen Gómez Rodríguez, su abuela, en una humilde vivienda ubicada en el número 26 de la calle Agustín Melgar de la colonia Playón Sur. La señora la cuidaba mientras su hija trabajaba.
“Era una buena niña, muy obediente, en casa era mi compañerita y muy amorosa. A veces yo tenía que trabajar y ella quería estar conmigo”, dice su abuela.
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Con lágrimas, relata que hace cinco meses, Rosa Aurora, madre de Danna, decidió llevársela al norte del país, donde aseguraba darle un mejor futuro trabajando. María no tuvo de otra más que dejar ir a su nieta.
“Le dije que me la cuidara mucho, porque yo quería mucho a mi bebé”, expresa su abuela.
En Nuevo León, conoció a Jorge, de 36 años, con quien se juntó y se convirtió en padrastro de Danna.
“Mi hija me dijo que había conocido a ese muchacho, que según era buen hombre, pero solo me mintió, según que él trabajaba y las mantenía, pero era al revés, ella era la que trabajaba”, relata.
Sentada en una silla, rodeada de trastes, mesas y una hamaca donde mecía a Danna para dormirla, María relata cómo ocurrió la tragedia. Respira, porque por momentos se lleva el aire, pues el dolor es mayor que su fuerza, aunado a los 67 años que tiene.
El día del crimen
María, contó durante una entrevista con MILENIO, que el pasado lunes primero de septiembre, Rosa Aurora llegó de trabajar y encontró a su hija con fuertes dolores y otros padecimientos. Jorge argumentaba que se cayó y que estaba enferma, por lo que comenzaron a atenderla en casa.
Cuenta que otra de sus hijas también se encontraba en el norte del país, y fue quien atestiguó lo que ocurrió.
“Mi otra hija, que también vivía allá, me dijo que mi bebé estaba encueradita y el asesino al lado de ella, le decía que le dolía la espalda. Llegó mi otra hija y le talló alcohol, la niña cayó en shock, cayó agonizando en el suelo, dicen que echaba espuma por la boca. Mi hija la cargó, pero ahí quedó, murió en su casa”, lamenta María.
A pesar de que desmayó, llamaron a los paramédicos de la Cruz Roja, pero estos confirmaron que Danna estaba muerta, por lo que ya no la movieron de la vivienda, y se dio paso a las autoridades ministeriales.
Esa misma tarde, le dieron la noticia a María del Carmen, quien no podía creer que su bebé hubiera muerto.
“Mis hijas no me querían dar la noticia, pero cuando llegué a casa, por la tarde, me abrazaron y me dijeron que mi Danna, mi bebé, estaba muerta, yo no podía creerlo”, señala.
Llora y toma fuerzas para seguir contando su pérdida, mientras aprieta la fotografía de su nieta.
El padrastro y la mamá de Danna están detenidos
A pesar de que Jorge intentó ocultar su asesinato, la Fiscalía de Nuevo León lo detuvo tras realizar la necropsia, donde se confirmó que la menor fue golpeada.
Los resultados indicaban que Danna presentaba:
- Contusión profunda en el cráneo.
- Hematomas en el abdomen.
- Evidencias de posible maltrato prolongado.
Rosa Aurora, la madre del menor, también fue detenida, y ambos fueron internados en un Cereso en el norte del país.
“Presenta golpes en el estómago, en los pulmones, asesinato; ya están detenidos los dos y me dijeron que los trasladaron al Cereso”, indicó la abuela.
María busca ayuda para trasladar el cuerpo de Danna y sepultarla en Minatitlán.
Además de lamentar la muerte de su nieta, María, se enfrenta a la falta de recursos para traer el cuerpo de la menor a Minatitlán, vive en una humilde vivienda y es de escasos recursos, pero quiere darle sepultura en donde durante tres años la cuidó.
Se espera que el cuerpo de Danna llegue el fin de semana a Minatitlán, al sur de Veracruz, y pretenden sepultarla en el panteón municipal.
Para apoyar a la señora en los gastos funerarios y de traslado, se puede hacer a través del número de cuenta 4169 1614 5475 3368 de BanCoppel a nombre de María del Carmen Gómez Rodríguez.
Algunos pobladores y altruistas del sur de Veracruz han comenzado a brindar ayuda a la señora, que se encuentra muy desconsolada.
La tarde de este jueves cuatro de septiembre, logró juntar 22 mil pesos para el traslado del cuerpo de Danna, pero aún falta cubrir los gastos de sepultura y funerarios para velarla en la vivienda donde Danna jugaba.
María pide que caiga todo el peso de la ley sobre su hija y Jorge.
María no quiere comer, solo abraza la fotografía de su nieta, la última que le tomó antes de que partiera a Nuevo León. Lamenta no tener el recurso económico para mantenerla y evitar que se la llevaran.
Llora, reclama y lamenta a Dios por permitir que una menor de apenas cuatro años muriera de esta forma.
“No puede ser que mataran a mi bebé, mi gordita está muerta, ¿por qué permití que se la llevara su mamá?, porque no tenía dinero para mantenerla”, expresa desconsolada.
María reclama a su hija por no proteger a Danna, y espera que caiga todo el peso de la ley sobre ella y Jorge.
“A mi hija no la quiero ni ver, no tengo palabras, no la quiero ver, yo quiero ver a mi bebé primero y que la autoridad les haga justicia, los dos lo tienen que pagar”, finalizó la abuela de Danna.
CHZ
