La noche del 28 de julio, el joven Orlando Navia Flores, de 27 años, y su familia, vivieron momentos de terror cuando su vecino, un hombre identificado como Gonzalo "N", de 45 años, los atacó por sorpresa con un machete y un cuchillo.
Víctima logra defenderse; "te pasaste", dicen policías
Los hechos se registraron en La Paz, en la colonia El Progreso, cerca de las 20:00 horas, cuando Orlando salió al patio frontal de su vivienda para regar, y de pronto, brincándole desde el techo, Gonzalo le cayó encima, asestándole de inicio un machetazo en la cabeza, cerca del área conocida como la mollera.
Orlando expone que, confundido por la situación, tardó en reaccionar un par de segundos, lo que Gonzalo aprovechó para continuar su ataque, abalanzándose en su contra.
"De inicio no entendía qué estaba pasando, porque no vi cuando me brincó, sólo sentí el golpe. Recuerdo ver mucha sangre, me brotó así como en chorro, y de pronto lo veo venir, diciendo que me mataría.
"En ese momento no pensé en mí, pensé en mi familia, en mi esposa y mi niño", dice Orlando.
Acto seguido, su agresor le hizo cortaduras en ambos brazos, y una más muy cerca del cuello; pero entre caídas y tropezones, ya con el forcejeo, Orlando lo codeó, lo que aprovechó para golpearlo hasta dejarlo inconsciente y desarmarlo.
De inmediato, llamó a la policía, pero como tardaron 20 minutos en llegar, él y su familia salieron a la calle a pedir auxilio entre los vecinos.
La esposa de Orlando, Montserrat, de 25 años, añadió que, cuando llegó la policía, contrario a hacerlos sentir a salvo tras el ataque, les cuestionaron el exceso de su defensa.
"Y morro, te pasaste... pídele a Dios que este amigo no se muera porque vas a pagar con cárcel", le soltó uno de los uniformados, pese a que Orlando se encontraba bañado en sangre y con heridas visibles en cabeza y brazos.
Tras recibir los primeros auxilios de los paramédicos, Orlando acudió junto con su familia primero al hospital, y posteriormente al Ministerio Público, donde le reiteraron el exceso de violencia en su defensa, manifestándole que podría ir a la cárcel o enfrentar un largo proceso, con una defensa que le costaría mucho dinero.
Autoridades resguardan puesta en libertad del agresor
En tanto, supuestamente Gonzalo seguía debatiéndose entre la vida y la muerte, por lo que Orlando estaba a la expectativa de un posible arresto, dependiendo de cómo evolucionara o empeorara la salud de su agresor.
Sin embargo, a menos de 48 horas de los hechos, durante las primeras horas del 30 de julio, una ambulancia y una patrulla dejaron a Gonzalo en su casa, ante el desconcierto de Orlando y su esposa.
En el video que circula en redes sociales se escucha cómo Orlando pregunta a los policías, quienes responden que se le otorgó su libertad y que sólo van a vigilar que ingrese a su domicilio.
"Eso no lo pude grabar porque se me descargó el celular, pero hasta me pidieron un martillo para romper el candado de su casa, y lo metieron caminando, cuando se supone que estaba muy grave", añadió.
"Por supuesto de inmediato agarramos lo que pudimos y nos fuimos. No podíamos estar ahí con ese tipo a un lado, nos pusieron en riesgo", fustigó.
Sobre la libertad de Gonzalo, la defensa de Orlando citó que cuando despertó en el hospital al día siguiente de los hechos, lo turnaron primero al Ministerio Público, pero éstos lo rechazaron por su supuesta delicada condición de salud.
Luego lo llevaron a la Barandilla, donde señalaron que no podían detenerlo y optaron por liberarlo.
"A nosotros nos dijeron que no podían detenerlo porque estaba muy golpeado, pero que en cuanto mostrara mejoría irían por él", precisó uno de los abogados de Orlando.
Sin embargo nada de eso pasó, pues a más de 10 días de los hechos, Gonzalo sigue en completa libertad, y como consta en videos de las cámaras de los vecinos, deambula por la calle de su casa con cierta normalidad.
Por el contrario, el Ministerio Público citó a declarar a Orlando y su familia, quienes han criticado que parece un caso más orientado al exceso en su defensa que a un intento de homicidio.
No es la primera vez; atacante tiene demandas de otros vecinos
Gonzalo "N" cuenta en su antecedentes con múltiples demandas y quejas de sus vecinos desde hace más 20 años, siendo la más antigua en 2003, por el delito de lesiones.
Acumula otras por el delito de daños en 2004, por ultrajes y violencia en 2006, por violencia intrafamiliar en 2021, por ultraje a la autoridad en 2022, por faltas administrativas en 2023 y dos más por el delito de amenazas este mismo 2025.
Orlando agrega que los roces iniciaron con Gonzalo prácticamente desde que llegó a esa casa, donde tiene viviendo poco más de un año.
"Tiene la costumbre de pasarse por los techos de las casas, y lo llegué a ver y pues lo confrontaba, le decía que no quería verlo arriba de mi casa, y se enojaba.
"La verdad desconocía que tenía todo ese historial de problemas con sus vecinos, como tengo poco viviendo aquí", comenta Orlando, añadiendo que una semana antes de los hechos, ya había una confrontación verbal con él, por la misma causa.
Indignación pública
Su caso se hizo viral en redes sociales, generando indignación en la población sudcaliforniana, bajo el cuestionamiento de hasta dónde está permitido defender tu vida y la de tu familia para no tener consecuencias legales, cuando alguien te ataca de esa forma dentro de tu propia casa.
Ante esta situación, la opinión pública ha pedido a las autoridades precisar los parámetros de una defensa legítima en Baja California Sur, para no caer en un "exceso de violencia" cuando alguien atente contra la vida propia o de familiares, como amagó el Ministerio Público en el caso del joven Orlando.
Por su parte, el procurador del estado, el recién nombrado Antonio López Rodríguez, no ha emitido posicionamiento al respecto, y cuando se le solicitó una declaración, su equipo de comunicación expuso que se encontraba fuera de la ciudad.
ksh
