Al medio día de este viernes 12 de septiembre, amigos, compañeros, personal administrativo y docente de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán de la UNAM, despidieron con un homenaje a Ana Daniela Barragán Ramírez, estudiante de Ingeniería en Alimentos y quien falleció por las quemaduras tras el accidente de una pipa el miércoles a la altura del Puente de la Concordia.
En el pasillo del edificio “L” fueron colocados tres pizarras en las cuales los estudiantes pudieron mensajes escritos de puño y letra propios, para destacar sus muestras de cariño, solidaridad y apoyo a la familia de Ana Daniela Barragán, a quien de esa manera honraron en las instalaciones donde estudiaba Ingeniería en Alimentos.

Su historia tomó relevancia, ya que sus cosas quedaron en el lugar y personal de emergencia pudo hablar con sus padres, pero no sabían en qué hospital se encontraba internada la joven, por lo que amigos, familiares y compañeros se dieron a la tarea de ubicarla.
La estudiante recorría más de 70 kilómetros cada día para poder llegar a la escuela y estudiar Ingeniería en Alimentos, que era su sueño. Dicha Ingeniería solamente se da en dicho plantel, de ahí la necesidad del traslado de más de dos horas.
Sus compañeros lamentaron la pérdida de una futura profesionista a quien describieron como una persona tranquila y comprometida con sus estudios.
“Desconozco el motivo por el cual sucediera el accidente, sin embargo, hubo bastantes pérdidas y en este caso tocó a nuestra compañera, mi más sentido pésame, es lamentable la situación, qué triste, qué trágico” aseguró Daniel, un estudiante de la FES Cuautitlán.
Una de sus compañeras Evelia, quien también es estudiante de la Facultad de Estudios Superiores de Cuautitlán, destacó que lo ocurrido Ana Daniela Mondragón les impactó y afectó emocionalmente, por lo que una vez que se enteraron de lo ocurrido a su compañera se organizaron y buscaron la manera de ayudar.
Otro de los cuestionamientos de los jóvenes fue que las autoridades muchas veces dejan pasar las cosas y no actúan hasta que lamentablemente se pierden vidas.
“Conozco las situaciones que vivimos, pero me parece triste la indiferencia por parte de las autoridades y que nadie hace nada hasta que sucede algo trágico y no sé si se vaya a hacer algo al respecto” lamentó Xóchitl.
Durante la despedida se pusieron velas en forma de cruz, fotos y mensajes hacia la joven, fue con música de gaita como se realizó el homenaje y se brindó un minuto de aplausos en el edificio L3 que era en dónde tomaba clases la joven.

También se gritó un Goya y la Porra Universitaria, para despedirla como parte de una comunidad que la estimaba, con la que compartía un sueño y no la olvidará.

HCM