Vecinos del fraccionamiento Residencial El Molino, en la zona norte de la ciudad de León, reportaron el hallazgo de un pequeño caimán en el patio de una de las casas. El hallazgo causó sorpresa y curiosidad entre las familias del lugar, ya que este tipo de reptiles no es común en la región.
El caso se dio a conocer luego de que el dueño de la casa, al percatarse de la presencia del animal, tomó una fotografía y la compartió en redes sociales con el grupo de vecinos del fraccionamiento. De inmediato comenzaron las especulaciones sobre cómo había llegado el reptil hasta la zona residencial.

Los caimanes habitan de forma natural en cuerpos de agua dulce como ríos, lagos y pantanos. En el caso de Residencial El Molino, cercano a la Presa El Palote, se espera que este ejemplar sea el único en la zona y que haya sido resguardado para evitar incidentes.

En otras ocasiones, en León se han registrado otros casos de la presencia de caimanes en diferentes zonas de la ciudad. En la mayoría, se trata de ejemplares adquiridos ilegalmente como mascotas y que posteriormente son abandonados o se escapan del lugar donde vivían. Cabe mencionar que, este tipo de reptiles no son originarios de la zona, por lo que suele causar mayor sorpresa.
Las autoridades y especialistas advierten que este tipo de especies exóticas representan un riesgo para las personas, ya que en algunos casos al crecer pueden volcerse agresivas. Ante ello, quienes no pueden hacerse cargo suelen liberarlos en presas o ríos, lo que también representa un peligro para el ecosistema local.
En este caso, se informó que vecinos reportaron el avistamiento a Protección Civil, aunque no todos tienen certeza sobre el desenlace, pues algunos creen que el animal fue capturado y trasladado al Zoológico de León, donde cuentan con instalaciones y personal capacitado para atender este tipo de fauna, mientras que otros sospechan que pudo haber sido recuperado por la persona que lo tenía como mascota.
En distintas ocasiones se ha reiterado en no comprar ni mantener especies exóticas en los hogares, ya que esto alimenta el mercado negro de fauna silvestre y pone en riesgo tanto a los animales como a las personas.