El deseo de las parejas en tener hijos, en ocasiones resulta un tema complicado al grado de necesitarse el apoyo de especialistas que los acompañen en el proceso para lograrlo.
Respecto al tema, el médico Iván Gómez del Ángel, especialista en Ginecología y Obstetricia y Biología de la Reproducción Humana expresa que la medicina reproductiva ha avanzado mucho en los últimos años. Indica que actualmente se logra ayudar a pacientes que casi no tienen óvulos, además de ofrecer terapias novedosas como el rejuvenecimiento ovárico y estimulaciones duales.
Manifiesta que hace algunos años el grupo etario más afectado eran las parejas mayores de 40 años; sin embargo, en la actualidad los problemas de infertilidad se empiezan a registrar en grupos de 30.
La causa más común de esterilidad a nivel mundial es el factor endócrino ovárico, que son alteraciones hormonales o metabólicas que afectan al ovario y que provoca que las pacientes no ovulen, por ende no se pueden embarazar.
Dijo que de igual forma se enfrentan a problemas en las trompas de falopio, las cuales se encuentran tapadas, cortadas o dañadas por cirugías previas.
Daños en la pareja: Hombres también son factor de infertilidad
El hecho de que las parejas no puedan procrear de manera natural no siempre es un problema en la mujer, ya que el factor masculino también presenta daños.
El especialista en reproducción humana detalla que hombres y mujeres aportan por igual el 90 por ciento de las causas por las que no se logra la fecundación, mientras que el resto son circunstancias desconocidas, dejando en claro que cualquiera de los dos puede tener un daño que impide procrear.
“A veces vienen y piensan que nosotros estamos bien y a lo mejor el paciente afectado es el factor femenino y la verdad es que no, aquí en el laboratorio nos llevamos sorpresas cuando vemos pacientes (hombres) y también tienen daños espermáticos, muchas veces pacientes jóvenes”, detalla el médico Iván García.

Cuando de manera natural no es posible la fecundación se recurren a procedimientos supervisados por los especialistas como la técnica in vitro, la cual ofrece la mayor tasa de éxito con un 75 por ciento de efectividad y puede variar dependiendo de los estudios previos a los que haya sido sometida la paciente.
Referente a los tabúes que aún existen, señala que hay algunas creencias que se descartan por completo, como el hecho que con la estimulación se pueda provocar cáncer, que son embarazos de alto riesgo, que el bebé pueda ser anormal; lo que reitera es completamente falso y por fortuna esas creencias cada vez son menos.
ICGC