Una palabra se ha vuelto parte de los conceptos utilizados en el día a día de los mexicanos: aguachicoleo. Esta surgió como una derivación de otra que también se popularizo en México.
Este nuevo termino ha captado la atención en todo el ámbito nacional, ya que está se origino como una variante que explica un delito que ha crecido en el país y que este 2025 es reconocida como parte del español.

¿Qué palabra origino la nueva?
En México, el robo de combustible, conocido como huachicoleo, ha generado una serie de términos que han adentrado tanto en el lenguaje coloquial como en el discurso de los medios de comunicación.
Según el Diccionario del Español de México de El Colegio de México (Colmex), palabras como huachicolero (usado para referirse a quien sustrae ilegalmente gasolina), huachicol (como sinónimo del combustible robado) y huachicolear (para describir la acción de extraerlo de manera ilícita) se han inmiscuido en el habla cotidiana y, sobre todo, en las noticias.
Este delito, que ha tenido consecuencias económicas y de seguridad en el país, no solo ha transformado el panorama social y político, sino que también ha dejado una huella lingüística que refleja la magnitud del problema.

Una nueva variante: el aguachicoleo
La crisis de agua en varias regiones de México ha dado origen a un nuevo término: aguachicoleo.
Concepto que se ha popularizado para describir el robo ilegal de agua de pozos, presas y ductos, una práctica que se ha vinculado con grupos delictivos organizados.
De acuerdo con la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), promovida por la Real Academia Española (RAE) y la Agencia EFE, el término aguachicoleo hace referencia a la extracción clandestina de agua, especialmente en tiempos de sequía.
¿De dónde viene huachicol?
El origen de esta palabra proviene del maya, según Ángel Soto en su nota de Notivox titulada "El origen de las palabras huachicol y huachicolero".
“Su origen está relacionado con la palabra guacho (derivada del maya waach), que, según el Diccionario de Mexicanismos de la Academia Mexicana de la Lengua (AML), tiene la acepción de ladrón.
Implicaciones lingüísticas
Este término es un neologismo, es decir, un nuevo termino que ha surgido como una respuesta lingüística a una problemática reciente y en crecimiento.

En esta misma línea, aguchicoleo refleja la importancia del agua en tanto a la distribución y preocupación por su apropiación ilícita.
Sin embargo, aún no figura en los diccionarios oficiales, pero ya ha ganado presencia en los medios de comunicación y en el debate público, al igual que ocurrió con huachicoleo en su momento.
Debe recordarse que el idioma está en constante evolución, adaptándose a los cambios sociales y tecnológicos. Es así que nuevos términos como este evidencian la capacidad del idioma para evolucionar y adaptarse a los cambios sociales.
YRH