En una muestra de cooperación regional sin precedentes, los gobernadores de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya; de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda; y de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, sostuvieron la Tercera Reunión Regional Noreste de Seguridad Pública, en la que acordaron una agenda común para reforzar la paz y el orden en la región.

El encuentro, celebrado en el Museo Tamux de Ciudad Victoria, tuvo como eje central la colaboración en operativos de patrullaje, intercambio de inteligencia y fortalecimiento de la infraestructura de seguridad en las zonas fronterizas y límites interestatales. Uno de los puntos destacados fue la instalación de una mesa de trabajo para atender el fenómeno de la regularización vehicular, así como estrategias conjuntas para el control de unidades extranjeras que han sido vinculadas a hechos delictivos.
Coordinación, inteligencia y blindaje vehicular
Entre los acuerdos alcanzados está también la creación de un registro de establecimientos de blindaje vehicular, así como la integración de Petróleos Mexicanos en las mesas de seguridad para mejorar la trazabilidad e identificación de vehículos a través de códigos específicos. En la misma línea, se buscará recuperar la seguridad en la carretera ribereña mediante inversión en infraestructura y mayor presencia de la Guardia Estatal.
Américo Villarreal Anaya enfatizó que estas decisiones se alinean con el nuevo gobierno federal encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. “Participamos con voluntad y trabajo, sumando nuestras capacidades al Plan México para dar cumplimiento a los cien compromisos de transformación”, expresó.
Un frente noreste coordinado por la paz y la justicia
A la reunión acudieron también los secretarios generales de Gobierno, fiscales y titulares de Seguridad Pública de los tres estados, así como mandos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Secretaría de Marina y el comisionado nacional de Migración, Sergio Salomón Céspedes.
En conferencia de prensa, el gobernador Villarreal subrayó que la coordinación interestatal permitirá avanzar hacia mejores indicadores de seguridad, indispensables para propiciar condiciones sociales justas y desarrollo económico equilibrado. “Nuestro deber es ofrecer paz, justicia y legalidad a nuestras comunidades, y lo lograremos trabajando como un solo frente en el noreste del país”, afirmó.
Con este nuevo esquema, las entidades del noreste buscan marcar una pauta nacional en cooperación intergubernamental, reforzando la gobernabilidad en una región clave por su peso estratégico y económico.
