La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo invocó su política exterior de permitir la autodeterminación de cada país, ante los reportes de que Estados Unidos desplegó una flota militar con rumbo a Venezuela.
"Es nuestra posición siempre la autodeterminación de los pueblos, la no intervención y la solución pacífica de controversias. La intervención, todo se resuelve con diálogo", dijo.
La mandataria leyó el artículo 89 de la Constitución, que detalla las directrices de la política exterior.
"Los principios de política exterior de México (...) en la conducción de tal política, el titular del poder Ejecutivo, la Presidenta, observará los siguientes principios normativos: la autodeterminación de los pueblos, la no intervención, la solución pacífica de controversias, la prescripción de la amenaza o el uso de la fuerza en la relaciones internacional, la igualdad jurídica de los estados, la cooperación internacional para el desarrollo, el respeto, la protección y promoción de los derechos humanos y la lucha por la paz y la seguridad internacional", informó.
EU despliega flota militar en el Caribe
Estados Unidos ha comenzado a desplegar a 4 mil agentes -principalmente infantes de Marina- en las aguas de Lationamérica y el Caribe para combatir a los carteles del narcotráfico, además de reforzar su presencia con aviones, barcos y lanzamisiles.
Los medios asignados a esta misión de vigilancia incluyen un submarino nuclear, aviones de reconocimiento P8 Poseidon, varios destructores y un barco de guerra equipado con misiles.
Uno de los oficiales citados por CNN calificó el despliegue como "una muestra de fuerza", antes que todo, con una intención disuasoria, pero recalcó que su mera presencia da al mando militar un abanico de opciones para utilizar la fuerza si así lo considera necesario.
Sin embargo, otras fuentes han puesto en duda la idoneidad de los marines para este trabajo, al carecer de entrenamiento en la lucha antidrogas, por lo que indicaron que necesitarían el apoyo de la Guardia Costera, cuya presencia en esa fuerza no está clara.
Aunque las tareas antidroga han recaído tradicionalmente en la Administración de Control de Drogas (DEA) y no en el estamento militar, las cosas parecen haber cambiado con el nuevo gobierno de Donald Trump.
Hace unos meses se hizo público una carta del secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien recordó que el Ejército estadunidense tiene por tarea defender la patria, y eso incluye "sellar las fronteras, repeler toda forma de invasión, incluida la migración masiva, el tráfico de drogas, el contrabando de seres humanos y otras actividades criminales, así como deportar a migrantes ilegales en coordinación con el Departamento de Seguridad Nacional".
Con información de EFE
SNGZ