Los trabajadores del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que habían sido contratados para el Censo de Población y Vivienda 2020 se volvieron a manifestar en las oficinas centrales del organismo que se ubican en el cruce de la Avenida 16 de septiembre y la calle Mexicaltzingo.
Exigen al instituto que respete el contrato, el cual vencía el próximo 17 de abril, luego de que el pasado viernes les exigiera a los empleados que firmaran su renuncia, argumentando que debido a la contingencia sanitaria por coronavirus el censo sería cancelado.
Ana Celia Martínez, quien laboraba como verificadora, mencionó que los amenazan con no ser recontratados en ninguna entidad federal si no cumplen la exigencia.
Sin embargo, dicha petición viola la Ley Federal del Trabajo, la cual estipula que en caso de decretarse contingencia sanitaria, el empleador debe pagar un día de salario mínimo por cada día de suspensión, hasta por un mes.
"El gobierno federal se está mostrando incongruente al exigir a los empleadores particulares que respeten los salarios de sus empleados y al mismo tiempo en el INEGI no respeta el salario de la gente que tenía contratada, aún de manera eventual", expresó Ana Celia.
A los trabajadores se les adeuda lo equivalente a 5 mil pesos. La mayoría de ellos dejó empleos anteriores para prestar sus servicios en el INEGI así que para muchos este dinero representa un apoyo importante en plena contingencia. Algunos son padres de familia y madres solteras que necesitan sustentar las necesidades básicas de sus hijos.
Hasta el momento, el INEGI no ha emitido un posicionamiento al respecto.
JMH