La Auditoría Superior de la Federación (ASF) informó que la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) realizó una supervisión inadecuada de la operación y el funcionamiento del programa de Comedores Comunitarios, que tenía como objetivo mejorar las condiciones nutricionales las personas en situación de pobreza y vulnerabilidad.
Luego de revisar los 2 mil 669.81 millones de pesos que representaron el 93.6 por ciento de los recursos ejercidos por la Sedesol en 2017, la ASF determinó que parte de los recursos fueron destinados a la adquisición de prendas, sin demostrar que fueran distribuidas a los comedores, ni a la consecución de los objetivos del programa.
Según la Auditoría 262-DS del Informe de la Cuenta Pública 2017, la dependencia no realizó ninguna investigación de mercado antes de firmar el convenio de colaboración con Diconsa para el equipamiento, suministro, abasto, almacenamiento y distribución de alimentos para los 6 mil 52 comedores comunitarios ubicados en las 32 entidades, de los que 5 mil 542 operaron en el 2017 y 5 mil 110 a partir del 2018.
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Indicó que en el documento firmado no se establecieron los montos ni periodos de entrega, domicilio de los comedores a beneficiar o los precios y cantidades mínimas o máximas de los productos y bienes a distribuir.
Además, destacó que tampoco se acreditó que los proveedores contratados entregaran los productos y bienes conforme a las especificaciones técnicas requeridas por la dependencia, ni demostró que los precios ofrecidos fueran razonables.
"La Sedesol realizó pagos a Diconsa por concepto de abasto de alimentos y equipamiento sin contar, en algunos casos, con los documentos que sustentaran la entrega-recepción de los bienes en los comedores. Además, no se realizaron los análisis de calidad de los bienes recibidos"; planteó.
RLO
