Un camión que surtía alimentos a una tienda de conveniencia terminó al interior de una funeraria luego de protagonizar un choque en el centro de Monterrey.
El accidente ocurrió cuando Antonio Almazán, de 31 años, circulaba por la avenida Pino Suárez de norte a sur en un camión de tres y media toneladas propiedad de una tienda de conveniencia.
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Sin embargo, en el cruce de Pino Suárez y Ruperto Martínez, un auto tipo Mustang en color negro avanzó y fue impactado por el camión.
Tras el impacto, el auto particular fue proyectado, mientras que Almazán perdió el control del vehículo.
Para evitar atropellar a un peatón, impactar otro auto o incluso terminar dentro de un negocio, el hombre decidió estrellar la unidad contra un muro de una funeraria.
Por fortuna el muro era del acceso al estacionamiento, aunque fue derribado debido a la velocidad con que circulaba el camión. También fue derribado un árbol y un poste de energía eléctrica, lo que dejó sin suministro varias calles y la Alameda Mariano Escobedo.
Al sitio acudieron cuerpos de rescate, que por fortuna no fueron requeridos, pues a pesar de lo aparatoso del accidente no se registraron personas lesionadas.
El conductor del Mustang, identificado como Alejandro González, alegó tener verde en la luz del semáforo; mismo argumento que el conductor del camión, por lo que se realizará una investigación para deslindar responsabilidades.
Personal de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) llegó hasta el sitio para reparar el desperfecto en el suministro de energía.
